Arenas de San Pedro expone al Miguel Delibes ilustrador

Ávila

Cuando Miguel Delibes apareció por primera vez por la redacción de El Norte de Castilla lo hizo buscando trabajo como caricaturista. Con 20 años publicó sus primeros dibujos en el periódico que acabó dirigiendo años después. "Pronto alguien se dio cuenta en esa redacción, que ese joven Delibes tenía alma de periodista y le empujó a hacer el curso de periodismo que entonces era obligatorio y sacar el título" dice Fernando Zamácola director de la Fundación Delibes. Ahí se acabo su trayectoria como dibujante y comenzó la de periodista y escritor.

Pero esa afición siempre estuvo ahí como demuestra la exposición abierta desde este lunes 8 de abril en el Instituto de Arenas de San Pedro. Los 21 dibujos que conforman la muestra no son de aquellos primeros años sino posteriores. Concretamente de 1960 cuando ya dirigía el periódico y su trayectoria literaria comenzaba a consolidarse tras el brillante lanzamiento que supuso ganar el Premio Nadal con 'La sombra del ciprés es alargada', novela, recordemos, ambientada en Ávila. 'El Camino' se había publicado en 1960, 'Mi idolatrado hijo Sisí' en 1953 y con el 'Diario de un cazador' había ganado el Premio Nacional de Literatura en 1955.

"Son una rareza. Son unas ilustraciones que hizo para una edición Norteamérica de 'El Camino' que se publicó en español. Respondió a una petición especial del editor al que le parecía simpático que, conociendo esa faceta de ilustrador, pudiera acompañar su propio texto con un dibujo para cada uno de los capítulos. La exposición recupera esos 21 dibujos junto con el fragmento del texto que hace referencia a esa escena que estamos viendo".

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Lo expuesto no son los dibujos originales que, según señala Zamácola, debieron quedar en manos de la editorial y no han podido ser localizados. Lo que se puede ver en la muestra son reproducciones en alta calidad que giran por distintos puntos de la región ya que la Fundación tiene un acuerdo con la Consejería de Educación para llevarla por centros educativos de las nueve provincias de Castilla y León.

"Son dibujos con un trazo muy sencillo, un tanto naif con la particularidad que son los únicos firmados con su nombre ya que en las caricaturas de El Norte de Castilla firmaba como Max. Ese rasgo de sencillez, con un trazo ligero, lo mantuvo tanto en una etapa como la otra" dice el Presidente de la Fundación que recuerda que la afición por el dibujo la mantuvo durante toda su vida.

"Dibujar también era un vehículo de relajación. Cuentan los que fueron sus alumnos en la Escuela de Comercio de Valladolid que muchas veces, cuando estaban haciendo los exámenes orales, Delibes dentro del tribunal estaba dibujando. En muchos casos eran caricaturas de los propios alumnos que luego las tiraba a la papelera. Nos cuentas que los propios alumnos iban, en ocasiones, a esa papelera a recuperar el dibujo y quedarse con él"

En la inauguración de la exposición 'Miguel Delibes Ilustrador. Los dibujos de el Camino' que puede verse hasta el 19 de abril, estuvo presente el presidente de la Fundación e hijo del escritor, Germán Delibes de Castro.

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