Detenido en Burgos un presunto responsable de la importación de ‘crack’
La Policía Nacional se ha incautado de más de un kilogramo de esta sustancia estupefaciente, que llegaba vía Barcelona en vehículos manipulados para ocultarla
Se ha incautado más de un kilogramo de esta sustancia estupefaciente, que llegaba a la ciudad vía Barcelona en vehículos manipulados para ocultarla / CNP
Burgos
Agentes de la Comisaría de la Policía Nacional de Burgos han culminado durante el pasado mes de marzo una importante actuación, denominada ‘Operación Samurái’ contra el tráfico de cocaína-base, logrando la detención de un varón en el barrio de Gamonal al que se considera el principal importador de esta sustancia en la ciudad.
El grupo de estupefacientes de la Brigada Provincial de Policía Judicial sigue comprometido con la erradicación de ‘puntos negros’ de venta de droga, para lo cual se debe perseguir también y con igual intensidad a los suministradores de la misma a mayor escala. La eficacia de su trabajo revierte en mejoras tanto de la convivencia como de la seguridad, así como en una reducción de otros delitos vinculados a su consumo.
Durante las últimas operaciones llevadas a cabo en Burgos, además de la detención de presuntos autores de tráfico de sustancias prohibidas, los responsables policiales han puesto un especial empeño en conseguir identificar a los responsables de escalones superiores en la pirámide de la droga, en este caso al suministrador de cocaína-base ‘crack’, responsable de su importación hasta Burgos.
La información obtenida señaló que la ‘mercancía’ llegaba desde Barcelona, en vehículos manipulados para ocultarla, utilizando un entramado muy “hermético y profesional”.
De hecho, se logró determinar que, por un lado, el finalmente detenido apenas interactuaba con la sustancia estupefaciente, y por otro, que tampoco atendía en persona las demandas de consumidores de poca entidad, extremando las medidas de seguridad respecto a sí mismo, hecho que dificultó en alto grado la consecución de suficientes indicios y pruebas para incriminarle en los hechos y presentarle ante la Autoridad Judicial.
En la posterior práctica del registro de su domicilio, los policías intervinieron más de un kilogramo de cocaína-base de gran pureza, así como diferentes útiles con los que el investigado lograba duplicar y hasta triplicar la cantidad de droga, aumentando exponencialmente la cantidad a proveer.
Una vez finalizada la práctica de las diligencias policiales, el detenido pasó a disposición de la Autoridad Judicial, quien decretó su ingreso preventivo en prisión.
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