La cuarta etapa de la Vuelta a Burgos Femenina acabará en Canicosa

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El Alto de Rozavientos, puerto puntuable de Primera Categoría ubicado a tan solo 15 kilómetros de la línea de meta, determinará el desenlace final de la IX Vuelta a Burgos Femenina que se disputa del 16 al 19 de mayo bajo la organización de la Instituto para el Deporte y Juventud (IDJ) de la Diputación de Burgos.

La carrera, que forma parte del calendario del Women’s World Tour, la máxima categoría del ciclismo femenino, reunirá una vez más en la provincia de Burgos a los mejores equipos ciclistas a nivel mundial.

Su proximidad a Canicosa de la Sierra, convierten el Alto de Rozavientos en el último escenario en el que las candidatas al podio final puedan marcar diferencias ya que una vez coronado el puerto (1.601 metros) comenzará un descenso rápido hasta prácticamente la línea de meta. Se trata de un puerto no muy largo, de 3,5 kilómetros, pero con un desnivel máximo que alcanza el 9% en su tramo más duro y que esta edición se convierte, además, en el ‘techo` de la Vuelta.

Bajo la nomenclatura de ‘Historia Natural` esta cuarta, última y definitiva etapa pondrá en valor parte del gran patrimonio natural que atesora la provincia de Burgos como es el caso de los extensos pinares que cubren las sierras de Neila y de la Demanda.

Tras la salida en Peñaranda de Duero y el paso por Zazuar, Quemada y Villanueva de Gumiel, las ciclistas pasarán por el yacimiento romano de Santa Cruz de Baños de Valdearados para seguir en dirección a Caleruega, cuna de Santo Domingo de Guzmán, patrón de la provincia de Burgos.

Desde allí, y tras atravesar los túneles del desfiladero de La Yecla, la carrera pasará a las puertas de la abadía benedictina de la pequeña localidad de Santo Domingo de Silos y de ahí seguirá por Carazo, Hacinas, Salas de los Infantes, Castrovido y Arroyo de Salas para afrontar la ascensión del Alto de Arroyo (3ª Categoría), primera dificultad montañosa de la jornada.