Comparaciones odiosas
La Firma de Guillermo Flores
"Comparaciones odiosas", la Firma de Guillermo Flores
Palencia
Los que “viajamos”, tendemos a comparar nuestra ciudad con otras que visitamos tratando de buscar nuestras fortalezas o debilidades. No me refiero a las grandes ciudades sino a las más parecidas en población y proximidad.
Estas últimas semanas he estado por Burgos y su provincia, en Cuéllar y Segovia, en Salamanca, y hace unos días en Toro y Zamora.
Es difícil tener mejor oferta turística, gastronómica o monumental, también laboral o de ocio que Valladolid, o que las vecinas Burgos y León. Tampoco con Salamanca podemos competir, Patrimonio Mundial de la Humanidad, 140.000 habitantes de ciudad y 20.000 estudiantes. Ni siquiera con Ávila y Segovia, también Patrimonio Mundial y aunque con menos población, tienen muy cerquita Madrid y sus 6 millones de habitantes.
Sí es más de nuestro tipo Zamora, ciudad a la que hacía mucho que no iba y antes lo hacía por trabajo y con otros ojos. Siempre la he colocado en la misma línea que Palencia por sus dimensiones, idiosincrasia y población. Y siempre decía que allí no había nada que ver. Pues a parte de muchas iglesias románicas, dicen que la mayor concentración de Europa, a parte de su Semana Santa que nos saca algo de delantera, tiene a diferencia de Palencia, casco viejo, una muralla y un castillo, que no es poco.
Además, tiene a Valladolid más lejos que nosotros, aunque a 60 km está Salamanca, de lo que también se quejan por allí. Y aunque la situación del comercio local es análoga en todos estos sitios con infinidad de locales comerciales vacíos, algo sintomático es que en Zamora aún se mantienen las franquicias de textil que ya se han ido de Palencia, creo que por tener a escasos 40 minutos Río Shopping.
Un día me dijo un amigo “Palencia hubiera progresado más si hubiera estado en Carrión”. Aunque este también me dijo que habría que haber cambiando de nombre para evitar la confusión con Valencia. En fin…
Lo hacemos habitualmente, pero las comparaciones son odiosas. No se trata de menospreciar ninguna ciudad, cada una tiene sus propios valores y encantos y no voy a enumerar los de Palencia y nuestra provincia que son muchos, porque si no los conoces es porque no quieres, que bien cerca los tienes.
No tenemos los mismos recursos que nuestros vecinos para grandes proyectos en los que nos deberían ayudar desde Madrid, pero sí que nos debería dar para mejores plazas y rotondas, al menos más creativas, fuentes de agua encendidas, atractivas terrazas de hostelería, mantener los parques y jardines, reponer árboles y que los locales de comercios cerrados estén limpios. No es ser muy ambiciosos, pero por algo se empieza.
Hoy tenemos en Palencia a 10.000 jóvenes pasándolo bien como a ellos les gusta, aún equipo en ACB y en un mes el reconocido Palencia Sonora. Disfrutad del buen tiempo.
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