La Universidad de Burgos participa en el estudio de la 'Mano de Irulegi'
Una inscripción en una mano de bronce recuperada en el yacimiento de Irulegi, Navarra, reescribe los orígenes de la lengua vascónica
Burgos
Una inscripción de Mano de La Irulegi, datada en el siglo I a.C., presenta rasgos primitivos de lengua vascónica, lo que sugiere que se trata del texto más antiguo encontrado en esta lengua, según señalan los investigadores. Esta mano de bronce ha sido hallada en el yacimiento de un poblado de la Edad del Hierro del siglo I a.C. situado al pie de las ruinas del castillo de Irulegi, Navarra.
Eneko Iriarte, investigador de la Universidad de Burgos, participa en este estudio junto con otros expertos investigadores como Mattin Aiestaran, director de la excavación del poblado de Irulegi, Javier Velaza, Catedrático de Filología latina en la Universidad de Barcelona, Joaquín Gorrochategui, Catedrático en Lingüística Indoeuropea en la Universidad del País Vasco o Carmen Usúa, restauradora del Gobierno de Navarra, entre otros.
En la pieza, utilizada en aquel entonces como amuleto de la suerte, se encontró un texto en el que se identifica la palabra “Sorioneku”, que admite la comparación con la palabra del euskera moderno “zori(h)on” ('buena fortuna'), y otros elementos, como la forma verbal eŕaukon o el locativo en -n de un topónimo.
Este nuevo hallazgo respalda la idea de que los antiguos vascones conocían y utilizaban la escritura en la prehistoria, ya que el amuleto estaba clavado en un soporte de madera a la entrada de un edificio particular para que la inscripción fuera expuesta y leída por quienes entraban a la casa.
El descubrimiento de La Mano de Irulegi, tiene grandes implicaciones para la comprensión epigráfica e histórica del territorio vasco y como señala Eneko Iriarte: “Puede constituir un punto de partida indispensable para el establecimiento de un mapa lingüístico de la región y para cualquier debate sobre el origen y el desarrollo de la lengua y la escritura vasca”.