Tubos Aranda hace historia y asciende a ASOBAL tirando de corazón y épica

Aranda de Duero

El peón ganó al faraón. Tubos Aranda vuelve a la máxima categoría del balonmano español tras derrotar a un equipo con dinero, con plantillón, pero sin el corazón y la familia que fue en todo momento Aranda, que se vio reflejado en sí mismo esta temporada en un partido que perdía de cinco y en el que acabó forzando la prórroga, superando al equipo de la capital en la cancha como en la grada, con un millar de aficionados amarillos.

Difícil inicio

Y es que el partido comenzó nuevamente truncado para los amarillos en los primeros minutos. El cansancio hizo mella. Muchos pases a priori sencillos, lanzamientos, e intentos que lamentablemente no salían, ponían de relieve un ataque espeso, si bien a nivel defensa y portería Tubos Aranda seguía fortalecido.

El portero burgalés se puso las botas en la primera parte, con hasta 7 paradas para minimizar a los ribereños, que comenzaron a meterse en el choque poniéndose a un gol. Faltó el del empate. Porque Burgos se aprovechó para volver a meter el turbo haciendo uso de las exclusiones, algunas muy rigurosas, como las acciones en área local. Así, se hizo grande al descanso (11-7) la distancia, haciendo compleja aunque posible, la remontada. Porque había que contar con el ADN arandino.

Épico

Y es que vaya segunda parte. Aranda comenzó a remontar goles ante un resultado todavía más adverso, acogiéndose a la épica, y pese a estar en el ecuador de la segunda parte perdiendo de cinco, siendo capaces de forzar el empate a segundos del final (19-19). Incluso, teniendo bola para lograr el ascenso de forma directa. No entró el lanzamiento de Megías, pero dio igual.

Dio igual porque en la prórroga tubos Aranda fue infinitamente superior a Burgos, se fue al descanso 1-4, y aguantó el riesgo rival para comandar un triunfo sustentado en la portería (Pau Guitart se merece una estatua en la ciudad), la defensa, y el corazón.

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Celebración y fiesta

La SER desplegó un carrusel muy emocionante que vibró con el ascenso sobre la pista. Emoción y muchas lágrimas de personas como Minguito o Berdón, con muchas horas echadas por el amor al arte. ”Todo merece la pena con un día como hoy”, reconocían. Alegría y emoción de los jugadores celebrando una fiesta que se ampliará este mismo domingo a las 19 horas en el Parque de la Isla.