La parcial y cínica política epistolar de Armisén
La Firma de Javier Gómez Caloca
Palencia
Buenos días, a la Presidenta de la Dipu le ha dado por remitir cartas a los Ministerios o entregarlas en mano cuando algún representante del Estado pasa por Palencia. En realidad, se las entrega a los medios de comunicación para su divulgación, ni espera ni la importa la respuesta. La última esta semana al Delegado del Gobierno; antes hubo otras, a la Ministra de Turismo porque no la informó de una visita, otra a la Ministra de Transición Ecológica, otra más a la Ministra de Transportes, otra a la RENFE, y otra y otra y otra.
La política epistolar y de embajadores ante la corte es más propia de otras épocas, pero si la Presidenta quiere utilizarla debe, al menos, mantener una mínima coherencia so pena de caer en el partidismo y, lo que es peor, en la hipocresía.
De 2015 a 2019 no encontró tiempo para cartearse con los ministros del PP que gobernaban España; o les trasladaba las reivindicaciones de la provincia en la intimidad o callaba por no molestar. Más bien lo segundo, de lo contrario, más de la mitad de las reivindicaciones que incluía en la misiva de esta semana ya estarían cumplidas. ¿No es acaso cinismo exigir ahora lo que está pendiente desde los años del PP y Rajoy y nada se dijo en su momento? De los 13 compromisos exigidos a bombo y platillo esta semana, no menos de 9 son de entonces o anteriores. Por ejemplo, la Autovía de Aguilar a Burgos, desdoblamiento de Palencia a Tordesillas, acceso de la capital a la A-67 y sobre el Corredor Atlántico el primero que tiene que empanarse es el Presidente de la Junta que, como bienqueda que es, quiere que vaya en zigzag por las nueve provincias.
También podía haber escrito al Gobierno del Estado, a sus ministros o directamente al malvado Pedro, para dar las gracias porque se haya vuelto a incrementar las pensiones de un tercio de la población palentina según el IPC, liberándolos de la condena del 0,25% que les impuso el PP; en dos años casi cien millones de euros a mayores para la provincia; por haber incrementado el SMI un 54 % a los 8.000 palentinos que tienen que llegar con él a fin de mes, por haber evitado que se despidiera por estar enfermo, por haber implementado, por primera vez en la historia, ayudas directas a autónomos, agricultores o transportistas, por haber evitado en pandemia el despido automático de más de 22.000 trabajadores, etc, etc. Cosas menores para tan alta dignataria.
Desde que manda en la Dipu no ha publicitado ninguna carta al Presidente de la Junta para pedirle que abra los consultorios locales, para que las obras del hospital se hubieran iniciado hace diez años, para que arreglara, no parcheara tarde y mal, la vergüenza de la carretera Cervera a Piedrasluengas, para que la Junta complementara las ayudas del Estado a autónomos, transportistas y afectados por ERTEs, para que retomara las obras de la Escuela de Artes que va para quince años paradas y abandonadas, para que deje de ser la única Comunidad que no financia a la UNED, para que su Consejero de Cultura no cierre la Caneja, para que pague los daños de la fauna salvaje antes y en cantidades semejantes a CC.AA. limítrofes. Podría también pedirle que cuando venga a vender la nada, al menos, se someta a las preguntas de nuestros medios de comunicación y sus profesionales.
También podría escribirse a sí misma y exigirse asumir sus competencias en materia de bomberos o mandar a sus Diputados Provinciales que traten a todos los municipios de sus partidos judiciales igual, que la hierba crece en todos los pueblos y todos tienen derecho a que se la corten. Menos epístolas, menos fotos, menos confundir la Diputación con el partido, más equidad en el trato a los municipios, más imparcialidad y la misma exigencia a Valladolid que a Madrid, gobierne quien gobierne. Buena semana.