Los festivales musicales llenan (por unos días) los pueblos

Valladolid

Camisa hortera, sombrero de paja con la correspondiente publicidad, gafas de sol, pulseras y calzado cómodo, este es el equipamiento perfecto para los festivales. Al menos, el más utilizado por los miles y miles de espectadores que acuden a estos eventos que han 'crecido como setas'. Cerca de 1.000 se celebran en todo el país y solo en Castilla y León son más de una treintena, muchos de ellos en pequeñas localidades.

Los festivales ya no solo ofrecen música, se convierten en una experiencia de viarios días con acampada, gastronomía y otras actividades de ocio que conquistan a los 'festivaleros' que se recorren el país para ver a sus grupos favoritos y conocer a otros.

Sonorama Ribera, un pionero

En Castilla y León contamos con uno de los festivales más importantes del país. Incluso ha celebrado ediciones en Uruguay y México. Sonorama Ribera nació en 1998 en la localidad burgalesa de Aranda de Duero. "No había festivales en aquel momento. Le cuentas entonces a alguien que iba a haber unos 1.000 festivales en España y te hubiera tildado de loco. Solo había 2 o 3 festivales: Benicasim, Contemporánea, que no sabíamos ni que existía, y Festimad. Soñábamos con tener un festival en nuestro pueblo y aquel sueño que parecía inverosímil hace 27 años, pues ya ves. Somos el país de los festivales y sobre todo hemos creado y hemos fomentado una industria alrededor de los festivales.", relata Javier Ajenjo, coordinador del Sonorama Ribera. Este año se celebra la edición 27 del 7 al 11 de agosto, está organizado por la Asociación Cultural Art de Troya y busca siempre llevar a los artistas más importantes del mundo y dar espacio a nuevas tendencias musicales y culturales.

¿Hay 'tarta' para tantos festivales?

Durante mucho tiempo se ha hablado de una burbuja de festivales. Hay tantos, cada fin de semana, la mayor parte concentrados de junio a septiembre, que muchos piensan que no hay sitio para todos, pero hay otros convencidos de lo contrario.

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En la Sierra de la Demanda, en Burgos, se celebra desde el año pasado el Alpaka Fest. Nació en Hacinas, un pueblo de 150 habitantes y este año celebrará su segunda edición los días 14 y 15 de junio. Hemos hablado con Adrián Alonso Izquierdo, uno de los organizadores. Valora el escenario actual en el que ellos han aparecido hace poco más de un año: "Se está masificando el tema de los festivales en España y en todo el mundo. No sé si hay sitio para todos, pero estoy seguro de que habrá sitio para los que se lo merezcan. Y creo que las condiciones que tiene el Alpaka Fest, sobre todo al ser un festival pequeño, en un pueblo de 150 habitantes, en una zona que sufre mucho el problema de la despoblación, pues creo que merece ese reconocimiento y que la gente lo valore y lo apoye. Hablo del Alpaka Fest, como puedo hablar de otros muchos festivales que se han gestionado en nuestra comarca, como Demanda Folk, por ejemplo, y del que cogemos muchas influencias. Y considero que esto es lo que hay que buscar ahora, que sea un festival diferente, que aporte cultura, tradición y calidad".

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En 2024 siguen naciendo festivales

A pesar de la cantidad de festivales que existen, a día de hoy se siguen creando otros nuevos. Es el caso del festival Florida del Duero. Un grupo de jóvenes de la localidad vallisoletana de Pollos han puesto en marcha este festival que va más allá de la música. "Da bastante vértigo poner en marcha en 2024 un festival, pero estamos muy ilusionados. Es un festival sin un genero musical definido, es un festival artístico multidisciplinar, hemos metido un poco de todo", explica Eduardo Gallo, uno de los organizadores de este festival que combinará música, teatro y gastronomía del 20 al 22 de septiembre.

¿Explorará en algún momento la burbuja de los festivales? Por el momento parece que hay público con ganas de disfrutar.