Sociedad

Riadas en Tierra de Campos

Los chubascos han inundado calles, patios y naves en Cerecinos de Campos

La bajada del caudal permite ver ya el coche que se tragó la riada cuando el vehículo cruzaba el arroyo.

Cerecinos de Campos ha resultado ser el municipio de la zona más afectado por las tormentas de la tarde de este pasado sábado. Las precipitaciones de agua superaron los sesenta litros de agua por metro cuadrado.

El desbordamiento del arroyo de la Vega provocó la inundación de calles y el agua llegó a colarse en el interior de más de una vivienda, aunque la situación más preocupante la han vivido las naves agrícolas y ganaderas más próximas al cauce y una explotación avícola donde han perecido ahogados miles de pollos. Además, la imprudente acción de un conductor que intentó atravesar con su vehículo el arroyo en pleno aguacero provocó un susto a sus ocupantes, que acabaron abandonando el coche poco antes de que este fuera tragado por el agua.

A estas horas, va decreciendo el caudal y el pueblo recupera lentamente la normalidad, aunque siguen incomunicados los dos barrios del pueblo por sus principales calles que, además de agua, rebosan tierra y piedras de los arrastres provocados por la corriente. No es extraño ver entre el lodazal cadáveres de topillos en algunas zonas. Los vecinos achican agua en corrales y naves afectadas mientras la agrupación de voluntarios de Protección civil y los bomberos de Benavente se han trasladado a la localidad para evaluar la situación y ayudar en las tareas de limpieza de algunos inmuebles y zonas de difícil acceso.

El Alcalde ha reunido a primera hora de este domingo a su equipo para acometer las actuaciones más urgentes. Tras comprobar que las instalaciones de abastecimiento se vieron afectadas por la inundación y el agua del grifo presentaba turbidez y suciedad, el Ayuntamiento ha cortado el suministro y ha procedido al vaciado del depósito para su limpieza y puesta a punto. Jesús María Deza alertó ya anoche al servicio de emergencias y a la Subdelegación de Gobierno de las previsibles consecuencias de la tormenta y a lo largo de la madrugada, además de la Guardia civil, los bomberos se han desplazado al municipio para realizar el seguimiento de la situación.