Las fuertes lluvias ponen en peligro el paseo Espolón de Roa de Duero
Los bomberos voluntarios fueron requeridos anoche ante el peligro de derrumbe de un tramo
Los excesos meteorológicos de las últimas horas están ocasionando algunos problemas en la Ribera del Duero. Igual que ocurriera hace varias semanas en Gumiel de Mercado, ayer una tremenda granizada podría haber ocasionado daños catastróficos en viñedos y otros cultivos en La Horra.
Pero no son las únicas consecuencias: los bomberos de Roa fueron requeridos anoche ante el peligro de derrumbe que sufre el paseo Espolón en las inmediaciones de la estatua del Cardenal Cisneros, donde las abundantes lluvias de ayer por la tarde produjeron un movimiento de tierras que pone en peligro la integridad del paseo y sus inmediaciones. A través de las redes sociales, este cuerpo de voluntarios ha hecho un llamamiento para que nadie se acerque a la zona afectada bajo ningún concepto. En su mensaje advierten también de que la circulación en esta localidad podría verse comprometida al haber afectado los derrumbes a una de las principales vías de acceso al casco urbano, quedando parcialmente cortada al tráfico la BU 134, también conocida como la R 30.
El alcalde, David Colinas, tenía conocimiento anoche de estos daños y estuvo coordinando los medios para adoptar estas medidas. "A mí me avisaron a casa sobre las 10 de la noche, me personé allí, estuve en contacto con la Guardia Civil y vimos en la carretera de acceso a Roa en la ladera del espolón unas piedras de tamaño considerable que se habían desprendido del muro de contención del paseo; se llamó a Carreteras para proceder al corte y los bomberos voluntarios de Roa acudieron para acordonar la zona del Espolón, igual que la Guardia civil", detalla.
Los daños han sido evaluados por los técnicos esta mañana, con la conclusión de que el Ayuntamiento tendrá que intervenir cuanto antes pero no en la medida que en un principio se pensaba . El alcalde asegura que “redactarán el proyecto para acometer la obra lo antes posible”.