Peleas, mucho alcohol al volante e insultos a los agentes

Aranda de Duero

Las fuerzas de seguridad tenían que intervenir este sábado por la tarde para separar a varias personas que estaban peleándose con palos y objetos contundentes en una reyerta con heridos. Los hechos ocurrían a plena luz del día, a las siete y media de la tarde, en la Plaza de la Constitución. Según el parte de la Policía Local, había cuatro personas involucradas en la pelea. Allí se presentaron agentes de este cuerpo y también de la Policía Nacional, para separarlas. También intervino el servicio de emergencias sanitarias, atendiendo in situ a algunos de los implicados, aunque no fue necesario ningún traslado al hospital.

No es la única pelea registrada esta semana. Ya la madrugada del viernes al sábado se registró otra en el entorno entre la calle Hospicio y Silverio Velasco, donde se produjeron desperfectos en algún retrovisor. Los implicados no quisieron denunciarse entre sí, pero los agentes sí abrieron un expediente por esos daños a terceros.

Avisos por la tormenta del viernes y pruebas de alcohol

Además de las numerosas intervenciones por las consecuencias de la tormenta del viernes, que dispara hasta 140 el número de avisos, hubo algunas incidencias reseñables en lo que se refiere a seguridad vial. En un intervalo muy corto de tiempo, la Policía Local denunció a dos conductores por comportamiento ilícito. El primero fue a las dos de la madrugada del domingo en un control de alcoholemia apostado en la esquina entre la calle San Francisco y la Avenida de Costaján, donde los agentes levantaron acta de un conductor, que tenía síntomas evidentes de embriaguez y que se negó a realizar la prueba. A continuación fueron avisados de que otro conductor en un estado similar había provocado daños en otro vehículo que estaba estacionado en la calle Hospicio. El hombre se negó también a colaborar y fue identificado.

Anteriormente, el viernes 5 alguien avisó de que un vehículo circulaba de forma errática. Los agentes le interceptaron en la calle Pizarro y, además de conducir sin carnet, lo hacía con un índice de alcoholemia de 1’20, que duplica la tasa a partir de la cual circular en ese estado se considera un delito.

En el historial de este fin de semana hay otros dos expedientes abiertos por faltas de respeto a la autoridad. Uno de ellos fue abierto a uno de los conductores interceptados en uno de los cuatro controles de alcoholemia desplegados y que insultó a los agentes al no estar conforme con el resultado de la prueba. En el otro caso el protagonista es el propietario de un vehículo que fue retirado por la grúa municipal y que también se encaró con los guardias.