Tribunales

El "capo de los ciberestafadores", el ponferradino Jordi Arias, suma una condena de cárcel por sus inicios con fraudes a 13 personas

El también conocido como Lupin declaró en el juicio celebrado en el juzgado de lo Penal de Ponferrada,

Ponferrada

Jordi A.F., conocido como 'Lupin' y catalogado como el mayor ciberestafador en la historia de España, suma 10 meses y 16 días de prisión a su lista de condenas e imputaciones por delitos de estafa, en este caso cometidos en el año 2017 y juzgados en la Sala de lo Penal de Ponferrada, cuyo Magistrado, Óscar Hernáiz, considera probado el fraude a 13 personas que pagaron y no recibieron productos de electrónica que ofrecía online en colaboración con un gallego de iniciales I.P.B, que también ha sido condenado.

Este caso forma parte de los inicios delictivos del conocido como “capo de los ciberestafadores”, natural de Ponferrada, y que en la actualidad se encuentra cumpliendo condena en la prisión de Villabona tras ser detenido en 2022 cuando preparaba una estafa de un millón de euros poniendo como cebo el Black Friday, aunque ya acumulaba ya beneficios de cerca de 300.000 euros al mes con estafas 'online', copiando páginas web de tiendas y sirviéndose de plataformas para que sus víctimas compraran productos que nunca llegaban a recibir.

La carga de trabajo de la agenda judicial ha justificado la celebración de la vista seis años después de la comisión del delito, realizado desde una web llamada “Thewhizcells” desde la que se acordaba la compra de mercancías electrónicas para la que realizaban transferencias bancarias a dos cuentas que los acusados habían abierto para recibir el dinero.

Aunque el Ministerio Fiscal pedía en su declaración previa una condena de tres años de prisión, el Magistrado aplica la atenuante “muy cualificada” de reparación del daño, dado que tanto él como su cómplice, que también ha sido condenado, han devuelto ya, a excepción de 133 euros, las sumas económicas con las que se quedaron y que suponían una cantidad de 4.333 euros. El fallo recoge la condición de consumidor habitual de estupefacientes del ciberestafador desde que era menor de edad, un problema al que destinaban el dinero que robaban en sus ventas fraudulentas con importes entre 200 y 500 euros, pero no lo considera una atenuante de su conducta.

Lupin, de 27 años, tiene prácticamente todas sus causas acumuladas en la Audiencia Nacional, debido a que fueron cometidas en distintos puntos de España. Hay más de 400 denuncias interpuestas contra él

 
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