Llega la hora de María Prieto O'Mullony y sus Guerreras

Una madrugada del verano de 2008 Zamora despertó, aunque algunos trasnocharon para poderle ver en acción, con la eliminación de Jon García en los Juegos Olímpicos de Pekín y así se esfuma la única opción de medalla de la delegación zamorana que, habiendo tocado techo en Barcelona 92, se iba difuminando en el mundo olímpico.

En Atenas 2004 a Jon le había acompañado Isidro Lorenzo y en Sidney 2.000 se podía hablar de delegación zamorana con Belén Sánchez, Emilio Merchán y un Juanjo Román que debutaba como entrenador.

Después de Jon García y pese a ser Zamora puntera en el mundo del piragüismo, las opciones fueron desapareciendo. La provincia se quedó huérfana en Londres 2012, en Rio 2016 y en Tokyo 2020. Tres Juegos Olímpicos sin participación pese a tener a varios deportistas rondando las opciones.

Zamora estuvo siempre cerca en piragüismo donde Merchán, Sánchez, Pedruelo, Barrios o Garrote fueron siempre nombres que se postularon, incluso para estos juegos de París. Otros deportes parecían poder tener su hueco porque Jon García siguió compitiendo, porque apareció Jaime Rosón en el prisma ciclista y porque Raquel Álvarez siempre rozó su participación olímpica.

Sin embargo, no ha sido hasta París 2024 cuando se ha roto la mala racha zamorana con la participación de María Prieto O'Mullony con las Guerreras de Balonmano y este 25 de julio, más de 4.000 días después, Zamora volverá a ser olímpica.

O'Mullony ha llegado hasta París por méritos propios, máxima goleadora de la Liga Guerreras Iberdrola, baluartte ofensivo del Aula Cultural y pieza clave en 2018 para que España conquistara los Juegos del Mediterráneo. La zamorana cierra una temporada histórica donde se ha ganado el puesto entre las elegidas por Ambrós Martín y quiere, ante Brasil, mostrar toda la calidad que atesora.

A las 14.00 horas, con los zamoranos pendientes del televisor, O'Mullony volverá a devolver a la provincia al olimpo del deporte.