Política

Una medalla menos para el dictador

IU-Podemos presenta este jueves a Pleno una moción con varias propuestas relativas a la memoria histórica, entre ellas retirar la Medalla de la Villa a Francisco Franco

Aspecto actual del exterior de una de las naves, donde varios grafitis ocultan el rótulo que la identificaba como parte del campo de prisioneros / Vicente Herrero

Aranda de Duero

El pleno ordinario de este jueves incluye una moción del grupo municipal Podemos-IU sobre memoria histórica, que propone varias líneas de actuación al Ayuntamiento arandino. Una de ellas es que se le retire a Francisco Franco la Medalla de la Villa que el Consistorio le concedió en 1960 en una moción de Alcaldía. Esta distinción se materializó en la residencia del dictador en el Palacio del Pardo en una visita que le hizo el 19 de marzo de ese año el que fuera alcalde en ese momento, Luis Mateos. Estas formaciones de izquierdas consideran que ya es hora de retirar esta distinción al que fuera uno de los más activos impulsores y participantes en el alzamiento militar contra el gobierno legítimo de la República y responsable de la muerte de cientos de miles de personas como consecuencia de la guerra que siguió al golpe de estado y de la represión durante la contienda y la posterior dictadura que encabezó.

Entre otras propuestas, la moción incluye también suspender el título de Hijo Adoptivo de Aranda al capitán de la Guardia Civil, Enrique García Lasierra, que asumió el mando de la sublevación de julio de 1936 en esta localidad y al que consideran “el responsable de los cerca de mil asesinatos y de todos los actos represivos cometidos en la zona”, según el estudio llevado a cabo por José María Rojas en su libro Semilla de Libertad.

Un reconocimiento institucional a la Corporación asesinada

En la propuesta Podemos e IU expresan que “resulta de una indignidad incompresible que el Ayuntamiento de Aranda de Duero mantenga los títulos y distinciones concedidos”, tanto al dictador como al capitán de la Guardia Civil, y también “que nunca se haya reconocido institucionalmente a la Corporación municipal que fue vilmente asesinada tras el alzamiento militar” y arrojada a la fosa de la Andaya, en Quintanilla de la Mata, cerca de Lerma. Sus restos fueron exhumados en 2007 y hoy reposan en el memorial del cementerio de Aranda. Para aquella Corporación, la moción plantea un reconocimiento institucional a través de una placa conmemorativa en un lugar visible del Ayuntamiento.

Otros puntos de esta propuesta hablan de “identificar, si aún quedan, posibles vestigios de simbología franquista presentes en el término municipal que deban ser retirados en cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática” y “fijar en el calendario anual de actos institucionales del término municipal, eventos de memoria histórica, reconocimiento a las víctimas y condena al régimen franquista responsable del golpe de estado”.

Dignificar el campo de prisioneros franquista

Así mismo, invita a hacer todas las gestiones necesarias con el fin de recuperar los terrenos de lo que fue el Campo de prisioneros franquista de Aranda de Duero entre 1937 y 1939, que sea protegido, rehabilitado y declarado Lugar de Memoria Democrática y forme parte de itinerarios y referencias pedagógicas de la historia contemporánea.