El alimoche, el buitre más pequeño
Felipe Nebreda habla en El Guardabosques de este ave que solo está de paso por la provincia de Ávila
El Guardabosques: el alimoche
Ávila
Félix Rodríguez de la Fuente lo llamaba el 'buitre sabio'. Es uno de los pocos animales que es capaz de utilizar herramientas. Lanza una piedra contra un huevo que no puede romper para alimentarse. Es una de las peculiaridades del alimoche, el buitre de menor tamaño de los que existen, aunque su envergadura puede llegar al metro y medio.
Al volar nos puede parecer una cigüeña con una contraste de colores entre el blanco y negro. Pero ya en tierra se le identifica mejor con una cara que no tiene plumas de color amarillo y un pico de rapaz, más delicado que otros buitres, lo que le plantea dificultades a la hora de alimentarse de grandes carroñas. Por eso, cuando llega frente a los restos de un animal, se queda esperando a que aparezcan sus 'hermanos mayores' para que lo despiecen. El alimoche se queda con los trozos de carne que el resto desechan.
Esa dificultad con las grandes piezas, hace que su principal alimento sean los cadáveres de animales pequeños a los que puede incluso cazar si están enfermos. La provincia de Ávila no acoge colonias de este tipo de buitres, pero si es lugar de paso en sus movimientos migratorios, por lo que se le puede ver cruzar por zonas elevadas como los puertos de montaña.
Se le considera 'vulnerable' con unas 1.500 parejas en todo nuestro país según el último censo de la especie. Y es que es muy sensible a los venenos y también sufre otros peligros como los impactos contra tendidos eléctricos. Este próximo 7 de septiembre se celebra el Día Internacional de los Buitres.
Del alimoche habla Felipe Nebreda en el último Guardabosques, donde también explicaba los fenómenos meteorológicos extremos de finales del verano como las grandes tormentas o ese pequeño huracán y manga vistos en la localidad de Riofrío hace unos días.
Luis Sánchez
Licenciado en Ciencias de la Información por...