Nueva temporada, distinto día, mismos propósitos

Palencia

Buenos días, comienzo la temporada con el mismo síndrome del folio en blanco de las pasadas. Nueva temporada, esta los viernes, y el mismo propósito: ejercer, y provocar también en ustedes, el pensamiento crítico, la duda, el no dar por válido todo lo que nos llega. Apliquen el pensamiento crítico a todo y con todos, empezando por mí, que, a estas alturas ya saben que tiro a zurdo en mis ideas, aunque luego, los que primero se molestan son algunos de mis conmilitones partidarios. Allá ellos.

Vamos con los sanantolines. Alejado de los tiempos hiperbólicos de ahora no les califico ni de “históricos”, como el Concejal de Cultura, pero mucho menos de “decepcionantes” como, siguiendo la tradición de quien está en la oposición, ha hecho el portavoz del PP. Sobre diez, los daría un ocho. Había que parar la malintencionada embestida del óvido de Valladolid y su adelanto de las fiestas y se ha hecho. No se moleste nadie, con óvido me refiero al Carnero que preside el Ayuntamiento pucelano.

Alargar las actividades, sean prefiestas, fiestas o postfiestas, ha sido un acierto. El coste económico de toda actividad municipal ha de evaluarse en términos de objetivos conseguidos y de retornos económicos para la ciudad, huyendo de la demagogia de que es mejor invertirlo en otras cosas. ¿Qué se diría si un año, para invertir en esas otras cosas, sobre las que es fácil que no estuviéramos de acuerdo, se hicieran unas fiestas con 100.000 euros, menos que algunos pueblos de la provincia?

La participación ciudadana ha sido masiva, la proximidad, la extensión de las actividades a los barrios todo un acierto saldando, por fin, una histórica deuda pendiente con ellos. ¡Cuántas veces hemos oído aquello que los barrios ya tenían sus propias fiestas!

La transversalidad en femenino, una apuesta del Equipo de Gobierno, con la elección de excelentes pregoneras de aquí, con

los puntos violetas frente a la violencia de género, etc es fundamental en estos tiempos posmachistas que intentan destruir peleados avances feministas. Una crítica: convertir el escenario de la Plaza Mayor en un reclamo publicitario de una empresa que medra a costa del deterioro de la sanidad pública no es muy progresista que digamos.

En plena semana festiva, me dejó atónito la primera, que yo recuerde, prohibición por la Subdelegación del Gobierno de una manifestación convocada por UGT y CCOO por riesgo de que se produjeran, abro comillas, posibles alteraciones de orden público, cierro comillas. ¡Joder si ni un Subdelegado del PP prohibió una concentración de mineros a las puertas del Congreso Provincial de su partido! Si la idea salió de la Subdelegación, mal, si fue indicada desde la Alcaldía, mucho peor. Me imagino a la Presidenta de la Dipu, responsable política del servicio en huelga, tronchándose de risa, como ella sólo sabe. Ante este peligroso precedente eché en falta que los sindicatos convocantes exigieran responsabilidades políticas, ¿por qué no en forma de exigencia de dimisión del prohibidor?

Termino, que un ministro con inmejorable curriculum económico está capacitado para presidir el Banco de España, no lo dudo, que la Ley permite esa elección, tampoco, que otros gobiernos de aquí y de fuera lo hicieron y lo hacen, también, pero, como titulaba ayer EL PAIS su editorial: Capacitado pero inadecuado.