El Arzobispado de Burgos presenta una demanda de desalojo contra las nueve monjas de Belorado
Después de un período prudencial de espera, los servicios jurídicos han procedido a interponerla ante el Juzgado de Briviesca
Las monjas de Belorado. / Europa Press
Burgos
El Arzobispado de Burgos, después de un período prudencial de espera, comprobado que no ha habido ningún intento de reconsideración por parte de las exreligiosas, ha procedido a interponer la demanda correspondiente ante el Juzgado de Briviesca para forzar el desalojo de las nueve monjas de Belorado.
En este tiempo de espera, se ha tenido conocimiento de la denegación de la inscripción en el oportuno registro del Ministerio del Interior de las asociaciones que las exreligiosas habían creado con las que pretendían transformar las entidades jurídicas canónicas de los monasterios en asociaciones civiles, algo que es jurídicamente inviable.
El pasado 13 de mayo, Dña. Laura García de Viedma, en ese momento abadesa del Monasterio de Santa Clara de Belorado, difundió públicamente un documento, en nombre de la comunidad, en el que manifestaba su libre voluntad de abandonar la Iglesia católica.
Tras la investigación previa canónica, y tras agotar los recursos que les invitaban a reconsiderar su salida de la Iglesia católica, el pasado 22 de junio se declaró la excomunión y expulsión de la vida consagrada de las diez hermanas que se habían adherido al cisma. Como consecuencia, a partir de ese momento, dichas exreligiosas carecen de título legal para habitar los inmuebles pertenecientes a los monasterios que ocupaban.
La Comisión Gestora manifiesta su preocupación por el estado de salud y el cuidado de las cinco hermanas mayores, que conforman la comunidad monástica, y está preparada para atender cuanto antes todas las necesidades que precisen, con la colaboración de la Federación de Clarisas Nuestra Señora de Aránzazu y de sus familiares.
La Iglesia vuelve a manifestar su disposición a ayudar en el camino de retorno a la comunión eclesial, donde serían acogidas con delicadeza y misericordia, a imagen de la parábola del hijo pródigo.