Iniesta se retira

Palencia

Esta semana Andrés Iniesta anunciaba su retirada del fútbol. Él ha sido un ejemplo como jugador. Ni una mala palabra, ni un mal gesto. Un hombre sencillo al que no se le ha subido el éxito. Sabía de dónde venía y lo que le costó llegar a la cima. Salir de su ciudad, llorar cuando no estaba con su familia, no tener la titularidad, algunas lesiones, no ganar el balón de Oro cuando se lo merecía, una fuerte depresión…

Iniesta ha caído bien a todo el mundo. Una persona que ha sabido guardar sus raíces familiares, mantener a sus amigos de siempre, apostar por lo que une en medio de la tempestad, para construir, junto a sus familia, una vida ejemplar por sus palabras y hechos.

Andrés es un modelo de sencillez, madurez, sensatez… Ha sabido situarse en los buenos y en los malos momentos. Un hombre solidario al que nunca se le ha subido la fama. Un deportista cuya vestimenta ha sido el sacrificio, la entrega, el buen juego, el esfuerzo…

No se ha tenido que hacer ningún tatuaje, ni pintarse el pelo, ni salir en las redes para provocar al adversario. Es el triunfo de una persona normal. Ahora que se lleva la crispación, los famosos light, los egocentrismos y la superficialidad, auspiciada por algunos medios… Yo defiendo que personas como Andrés Iniesta tienen que ser los paradigmas en los que fijarnos para construir una sociedad madura, libre e independiente.