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La solución para la avenida del Castillo de Ponferrada mantiene el tráfico descendente frente a la fortaleza

El proyecto presentado por Coalición por el Bierzo y PP desvía el tráfico ascendente por la calle Buenavista y mantiene el tráfico descendente a 20 km/h

En esa zona habrá tráfico descendente con circulación a 20 kilómetros por hora

Ponferrada

La solución del Equipo de Gobierno de Ponferrada para eliminar tráfico frente al Castillo mantiene la circulación descendente y desvía la circulación ascendente hacia el barrio de San Andrés. Esa es la alternativa, descartado definitivamente el soterramiento de la avenida del Castillo, que han acordado PP y Coalición por el Bierzo con el apoyo de la Junta, que financiará las obras con 3 millones de euros, y la participación del ministro de Transportes, que se ha comprometido con el alcalde a estudiar la construcción del tramo de la Ronda Sur que corresponde al Casco Antiguo, lo que supondría una solución aún más ambiciosa a largo plazo. En resumen, el tráfico que se dirige hacia el Puente García Ojeda tendrá que circular a menos de 20 kilómetros por hora por un solo carril controlado por radar de tramo. El tráfico que sube hacia el casco antiguo será desviado a la derecha, hacia el barrio de San Andrés, pasará por delante del Hospital de la Reina y volverá a salir a la avenida del Castillo por Guido de Garda, según lo resumía el teniente de alcalde, Iván Alonso

Son unos 200 metros de desvío. Para completar la peatonalización hasta el Crucero, otros 140 metros, habría que esperar a la construcción de ese tramo de la reivindicada Ronda Sur que el ministro Óscar Puente se ha comprometido a estudiar junto al Ayuntamiento. El alcalde, Marco Morala admite que todavía no hay financiación ni plazos, pero ese compromiso ha sido el que ha completado el puzzle que ha permitido presentar esta alternativa

Es una solución de futuro para el Casco Antiguo, según el alcalde, puesto que se completará con las obras del entorno del Crucero o la semipeatonalización de Obispo Osmundo con calle Ancha.

No hay plazos y las obras se harán por fases, aunque hay actuaciones más urgentes, como la construcción de aceras frente al Hospital de la Reina o el propio carril de la Avenida del Castillo.

El alcalde aseguraba que el cambio desde el soterramiento acordado en el pacto de Gobierno no se debe a la existencia de informes contrarios sino a la decisión de aprovechar la oportunidad que se ha presentado.

La intervención contempla obras en todos los tramos del nuevo diseño. Habrá aparcamientos disuasorios en Mercado Viejo, Hermanos Pinzón y Don Pelayo. También se urbanizará el callejón de San Lorenzo.

Iván Alonso considera que esta solución mejorará sensiblemente el casco antiguo, pero a la vez llamaba a la población para que hagan un uso sensato del automóvil y escojan otras alternativas para llegar a la zona alta siempre que puedan.

 
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