Sociedad

Asistencia personal y fisioterapia con 'Repuebla Calahorra de Boedo'

La FSMLR participa en este proyecto que impulsa la localidad con el objetivo de mejorar la calidad de vida de sus habitantes mayores y atraer nuevos pobladores

Asistencia personal y fisioterapia con 'Repuebla Calahorra de Boedo' / FSMLR

Palencia

Una trabajadora social, varias asistentes personales y una fisioterapeuta ayudan desde hace unos meses a los habitantes de Calahorra de Boedo a mejorar su calidad de vida y a atraer nuevos pobladores. La iniciativa forma parte del proyecto “Repuebla Calahorra de Boedo”, que comenzó a funcionar a mediados de año, promovido por el ayuntamiento de la localidad, gracias al apoyo del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Para lograrlo cuentan con el apoyo del equipo de la Fundación Santa María la Real y, muy especialmente, con la experiencia en atención a personas mayores y/o dependientes de sus centros Tercera Actividad.

El censo de la localidad palentina de Calahorra de Boedo registra actualmente poco más de 80 habitantes y la mayoría son personas mayores de 65 años. Pensando en ellos, en mejorar su atención y cuidado y en atraer nuevos pobladores, el ayuntamiento de la localidad puso en marcha el proyecto “Repuebla Calahorra de Boedo: apostando por la innovación social y la sostenibilidad”.

Una iniciativa que cuenta con dos líneas de actuación: realizar un estudio que permita ofrecer una atención personalizada y de calidad a la población mayor, detectando sus necesidades, y atraer a nuevos pobladores. Para lograrlo han confiado en la experiencia del equipo de la Fundación Santa María la Real, que ya ha participado en proyectos similares como Conecta Rural, en los municipios de Barruelo de Santullán y Brañosera y que, además, cuenta con dos centros Tercera Actividad de atención a personas mayores y/o dependientes, uno de ellos ubicado en Aguilar de Campoo. El trabajo comenzó en mayo y se prolongará hasta finales de 2025.

Atención a mayores y nuevos pobladores

Durante estos casi seis meses de trabajo, ya se aprecian los primeros resultados. Una trabajadora social de la Fundación Santa María la Real se desplaza periódicamente a Calahorra para cumplir un doble cometido: detectar las necesidades, requerimientos y áreas de mejora en atención a personas mayores y, por otro lado, ofrecer asesoramiento y acompañamiento a posibles nuevos pobladores.

A raíz de estas visitas se han iniciado otras a cargo de una fisioterapeuta y varias asistentes personales. “Las asistentes personales intervienen de forma individual poniendo en marcha actividades terapéuticas relacionadas con el proyecto vital de las personas mayores de la localidad”, explica Vanesa Mateo, trabajadora social. “Entre las tareas que realizan están ejercicios de estimulación cognitiva y sensorial, acompañamiento dentro y fuera del hogar, mantenimiento y desarrollo de habilidades sociales o dinamización y motivación”, concreta.

Otra de las acciones es tratar de mejorar la accesibilidad a servicios sociosanitarios. “Por ahora, una fisioterapeuta de nuestro equipo acude semanalmente, realizando su labor no solo con personas mayores de 65 años, sino con todas aquellas que lo necesiten independientemente de su edad”. El primer paso es evaluar para poder establecer después un plan de acción individualizado. Del mismo modo, se trabaja para contar con el apoyo de otros profesionales de atención primaria que ya pasan consulta en el municipio y para lograr que existan otros servicios como podología o psicología.

“Otro reto es garantizar un transporte público asequible a localidades cercanas más grandes como Herrera de Pisuerga, dado que entre los vecinos de Calahorra de Boedo nos encontramos con personas que no disponen de coche o no tienen a nadie que pueda facilitar su desplazamiento cuando lo necesitan”, afirma Vanesa Mateo.

Al fin y al cabo, el reto de “Repuebla Calahorra” es elaborar sendos estudios, que permitan mejorar la calidad de vida de los vecinos del municipio y que identifiquen las necesidades y oportunidades para luchar contra la despoblación, facilitando la llegada de nuevos habitantes.