Cuando llegue la primavera las obras seguirán ahí

Aranda de Duero

“Cuando desperté, el dinosaurio todavía estaba allí”, es un famoso microrrelato del escritor guatemalteco Augusto Monterroso. Alguien que hubiera hibernado en Aranda durante este último año podría adaptar este inquietante y escueto enunciado a las obras de remodelación de los Jardines de Don Diego, que no estarán finalizadas antes de la próxima primavera. La Concejal de Urbanismo comenta a través de las redes sociales del Ayuntamiento de Aranda algunas cuestiones relativas a este enésimo retraso y la hoja de ruta que hay ante la evidencia de que las obras no van a estar finalizadas el 15 de noviembre, que era la fecha fijada en la última ampliación del plazo.

Ana Hervás habla de una serie de incidencias comunicadas por la empresa y que tendrán que ser cotejadas con la dirección facultativa para determinar si justifican este retraso. En cualquier caso, explica que la intención del Ayuntamiento es que la mayor parte de la obra esté resuelta antes de que lleguen las navidades para causar el menor perjuicio posible a la ciudadanía. “Tenemos que valorar con la dirección facultativa, independiente contratada por el Ayuntamiento, que esas incidencias que nos ha dado la empresa justifican los retrasos y los plazos que la empresa nos está dando como fecha estimada de finalización, que es un plazo genérico del 31 de marzo”, expresa la edil de Sentir Aranda, detallando que “una de esas incidencias se corresponde con el cierre de las empresas de aglomerado, que concurren desde mediados de diciembre hasta el mes de marzo; obviamente, esto nos va a afectar –reconoce- y queremos hacer que esta obra vaya por fases: es decir que antes de Navidad podamos tener la mayor parte de la obra resuelta y abierta al paso de peatones y de vehículos y finalizada; nuestro objetivo es que la obra avance lo máximo posible para que la fase de fresado y asfaltado pueda estar la mayor superficie posible antes de Navidades”, añade.

Las obras de los Jardines de Don Diego comenzaron en julio del año pasado. Tenían una previsión de prolongarse durante 10 meses, pero en abril la constructora solicitó una prórroga de cinco meses. Llegados a este punto, la edil de Urbanismo habla de la necesidad de valorar qué plazos de ejecución son los razonables y sobre todo quién tiene la responsabilidad de esos retrasos antes de determinar posibles acciones por el incumplimiento de los plazos.