El alfoz clama por la mejora del transporte metropolitano

Valladolid

A los problemas con el transporte en autobús de Tudela de Duero y Renedo de Esgueva se une ahora Santovenia de Pisuerga. Al igual que en los anteriores casos, llevan años denunciando un servicio que no les satisface. Ni los horarios se ajustan a sus necesidades ni hay buses suficientes para todos.

Ana Fernández, una de las usuarias afectadas, lamenta que tras años de protestas nada haya cambiado: "Un horario que no se acomoda con las necesidades, sobre todo fin de semana, pero esto se une a que en las horas punta, a primera hora de la mañana y a medio día, por un aumento de la población, hay mucha gente que no puede subir y se queda sin poder trasladarse".

Es más, denuncian que en ocasiones los vehículos van llenos, con lo que se dan circunstancias peligrosas, como caídas por frenazos.

Al menos, aseguran, tienen de su parte al ayuntamiento, que ha hablado con la Junta de Castilla y León, puesto que es un servicio que dependen del gobierno autonómico, para trasladarle el malestar de los ciudadanos.

Reclaman que se ajusten las concesiones del transporte interurbano -en su caso, La Regional- a la nueva realidad de los pueblos del alfoz, ya que en la ultima década la población se ha disparado pero siguen con la misma dotación: "Hay que revisar las concesiones y adaptarlas a la realidad actual; en el caso de Santovenia, ha crecido bastante en población en los últimos años y el servicio no da abasto".

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Si no cambian las cosas, no descartan formar una plataforma ciudadana y buscar otras vías de presión.

Más pueblos

Las protestas en Santovenia llegan tras años de reclamaciones en Tudela de Duero. En este municipio recogieron firmas para que la concesionaria, Linecar, mejorara el servicio y terminara con algunos problemas que afectaban, sobre todo, a los viajeros de primera hora del día, trabajadores y estudiantes fundamentalmente.

Consiguieron que pusieran una lanzadera, a las 6.50, con menos paradas intermedias para asegurar una llegada rápida a la capital. Sin embargo, la solución no fue del todo efectiva porque ese autobús no llevaba máquina para "picar" los billetes, con lo que los usuarios debían subirse en el de las 7.00, validar en él sus billetes, para después apearse y subir a su autobús.

Y esa curiosa situación se une al incumplimiento de horarios, la cancelación del servicio sin aviso previo y las averías constantes. Una de las usuarios llegó a denunciar en la Cadena SER que en un trayecto fueron los propios pasajeros los que tuvieron que sujetar la puerta del bus para que no se abriera en marcha.

En Renedo han recogido firmas -más de 2.000- para reclamar a la Junta que mejora el servicio que les une con Valladolid capital. Los vecinos se quejan de pocas frecuencias, sobre todo en los fines de semana, y que hacen casi insalvables los apenas seis kilómetros que les separan de Valladolid.

También Arroyo de la Encomienda

Arroyo de la Encomienda se suma a esta lista. Un problema que viene de lejos con autocares que omiten alguna frecuencia sin aviso, el propio comportamiento de los conductores o incluso la velocidad a la que circulan. Hace unos años el consistorio puso en marcha una aplicación para hacer llegar las quejas de manera directa, pero hasta hace unos meses no se ha mejorado el funcionamiento, tal y como explicaba Alba Acero, portavoz del PSOE en la Arroyo: "Tampoco funcionaba correctamente esa aplicación hasta hace un par de meses, que se ha podido ver la respuesta del equipo de gobierno. Hay falta de seguridad también a bordo de los buses".