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La mujer acusada de abusar sexualmente de su hijo de 8 años no comparece ante el juzgado

Esa incomparecencia ha provocado la suspensión de la vista oral prevista para este lunes en la Audiencia de Palencia

Audiencia de Palencia / Beatriz Álvarez

Palencia

Fuente judiciales confirman que la mujer que tenía que haber sido juzgada esta mañana en la Audiencia de Palencia por presunto abuso sexual contra su hijo que tenía ocho años en el momento de los hehcos no ha comparecido ante el juzgado por causas desconocidas. El ministerio fiscal solicita una pena de 12 años de prisión. En el apartado de responsabilidad civil pide para ella que indemnice a la víctima con 30.000 euros por los daños morales causados, así como la prohibición de aproximarse a su hijo a menos de 500 metros, a su domicilio, lugar de estudios o otros que pudiera frecuentar, así como la prohibición de comunicarse con él por cualquier medio por un periodo de 15 años. El fiscal mantiene que la acusada tenía alteradas sus capacidades cognitivas por el consumo del alcohol. Ahora la mujer queda pendiente de los siguientes pasos judiciales.

Según el escrito del ministerio público los hechos se remontan al año 2018 cuando la mujer residía junto a sus dos hijos, uno mayor de edad y otro menor, en la capital palentina, fue en el mes de junio de ese año cuando la acusada, tras ver un capítulo de una serie de televisión en la que aparecían miembros de una misma familia manteniendo relaciones sexuales, supuestamente propuso a su hijo mantenerlas en ese momento, a lo que el chico manifestó su negativa.

Pese a ello y al menos durante el período de tiempo comprendido entre el mes de junio y el día 5 de agosto de 2018, siempre según la versión de la Fiscalía, "la acusada, movida por el ánimo de satisfacer su deseo libidinoso," aprovechaba los momentos en los que se quedaba a solas con su hijo en la vivienda, para mantener relaciones sexuales. Dichas conductas se repitieron de manera continuada durante el citado periodo de tiempo hasta que el 5 de agosto cesó la misma debido a una intervención policial que trajo consigo el final de la convivencia.

Ese día, tras la llamar la acusada al 112 comunicando que tenía problemas con el alcohol y que tanto ella como su hijo llevaban días sin comer se produjo la intervención de la Policía Local que trasladó al menor a un centro de acogida asumiendo la Junta de castilla y león la tutela legal del niño en octubre de ese año. Los hechos ahora juzgados fueron denunciados el 16 de agosto de 2022 y el 17 de enero de 2023 se dictó por parte del Juzgado de Instrucción Número 5 de Palencia la prohibición a la acusada de aproximarse a su hijo a menos de 500 metros, a su domicilio, lugar de estudios u otros que pudiera frecuentar, así como la prohibición de comunicarse con él por cualquier medio.