Palencia dice NO a la violencia contra las mujeres
Bajo el lema "Se acabaron los privilegios" y convocada por la Plataforma por los derechos de las mujeres de Palencia una manifestación ha recorrido el centro de la ciudad para expresar su repulsa a esta violencia y exigir medidas reales
Palencia
Bajo el lema "Se acabaron los privilegios" y convocada por la Plataforma por los derechos de las mujeres de Palencia la sociedad palentina ha recorrido la calle Mayor de la capital para expresar su rechazo más rotundo contra cualquier tipo de violencia que se ejerza sobre las mujeres, en cualquier ámbito social y proceda de quién proceda. A lo largo de la manifestación se han ido leyendo los nombres de las 66 víctimas registradas en España desde el 25 de noviembre del pasado año hasta hoy y ha finalizado con la lectura de un manifiesto en la Plaza Mayor en el que, entre otras cuestiones, se ha querido dejar claro que el maltrato "no es de derechas ni de izquierdas" ya que está en todas partes, igualmente, ha quedado patente la preocupación por la propagación entre los más jóvenes de las corrientes que niegan la violencia de género y han exigido protocolos y políticas a todas las administraciones públicas que permitan a las mujeres "ser libres" poniendo siempre el foco en el agresor y no en la víctima como ocurre con demasiada frecuencia. El acto ha finalizado con la actuación de la actriz palentina Mercedes Herrero que ha escenificado varias historias contra la prostitución.
El manifiesto, que reproducimos a continuación de manera íntegra, ha sido leído por Dana, una integrante de la plataforma:
"La violencia contra las mujeres es estructural y está basada en un sistema patriarcal a partir de mitos y constructos sociales que derivan en violencia contra las mujeres: agresiones, violaciones, abusos, trata, vientres de alquiler, ablación del clítoris, prostitución, matrimonios forzosos, ... Qué más pruebas necesitan los reaccionarios contra las mujeres para darse cuenta de que la violencia de género es real y que de una manera o de otra todas la hemos sufrido: falta de corresponsabilidad en casa, no hay conciliación laboral, la brecha salarial, las que tenemos los hijos e hijas y frecuentemente quiénes las cuidamos somos nosotras, y también el acoso, las indirectas, los chistecitos, todos los micromachismos:
. Cuando un hombre explica a una mujer algo que ella en realidad ya entiende o conoce, de forma condescendiente y paternalista y presuponiendo de forma injustificada que lo desconoce. (Mansplaining)
. Cuando nos manipulan cuestionando nuestra cordura, desacreditando nuestras percepciones y nuestros recuerdos para que dudemos de nuestro propio juicio. (Gaslighting)
. Y también se dan extorsiones digitales cuando la pareja o expareja amenaza con publicar imágenes o vídeos con contenido sexual privado, lo que conlleva un delito contra la intimidad.
ANTE TODO ESTO:
Tenemos que decir de una vez por todas que ¡¡LA VERDAD ES FEMENINA!! y es que resulta que las mujeres hablamos entre nosotras, SIII SIEMPRE LO HACEMOS, y esa es nuestra fuerza también. Porque hay falsos aliados feministas y exceso de testosterona en las organizaciones y el machismo en el ámbito de la izquierda es equiparable al de la derecha.
El hecho de que un político sea bueno no significa que se le pueda perdonar todo, y da igual que sea de izquierdas o de derechas, están en todas partes. No hay nada más parecido a un maltratador de derechas que uno de izquierdas. Hacen falta YA protocolos anti-acoso en todas las organizaciones y es muy importante que nada quede oculto, debemos seguir denunciando.
Ya son demasiados aquellos que anteponen ideas secundarias a la libertad y a la seguridad de las mujeres, son demasiados ya aquellos que niegan la libertad y los deseos de las mujeres. Son demasiados ya aquellos que nos ningunean, nos maltratan y nos dañan, nos matan. ¡¡NOS QUEREMOS VIVAS y LIBRES!!
Y no debemos minimizar el abuso, no debemos pasar por encima de él, el desprecio a la mujer sigue ahí cuándo no nos escuchan, cuándo no legitiman nuestros sentimientos, cuándo no hay cooperación en casa, cuándo nos hacen el vacío, cuándo nos mienten, cuando hay maltrato… no nos callemos NUNCA y sigamos apoyándonos entre nosotras SIEMPRE.
Como dice Giséle Pelicot ya va siendo hora de que la vergüenza y el miedo empiecen a cambiar de lado.
Y lo estamos viendo en Estados Unidos, podemos ver como la misoginia a favor de Donald Trump significa un ataque flagrante de la extrema derecha al valor de las mujeres, y no es la primera vez que esto ocurre en América, ni la primera vez que pasa en el mundo, porque en el mundo del trabajo, en el mundo de las ideas, en nuestros círculos cercanos el rechazo a las mujeres valiosas ocurre todos los días, a todas horas.
¡¡Y NO NOS OLVIDAMOS DE LAS MUJERES EN ORIENTE PRÓXIMO!! En Gaza, en Irán, en Afganistán dónde viven la expresión más dantesca del machismo llevado al límite. ¡¡NO ESTÁIS SOLAS!! ¡¡ESTAMOS AQUÍ!! ¡¡CON VOSOTRAS!!
Y regresamos al aumento del machismo entre la juventud, demostrado por la proliferación de los llamados incells en las redes sociales, que niegan la violencia de género y ponen en evidencia su falta de educación sexual y su falta de sensibilidad hacia los deseos y los sentimientos de las mujeres, denigrándonos. Están ciegos y se olvidan de que el rechazo que las mujeres sienten por ellos acabará jugando en su contra, y entonces quizá sea demasiado tarde para poder retomar unas relaciones sanas.
Pongamos el foco en el agresor, NO en la víctima. Y desde aquí hacemos un llamamiento a los medios de comunicación a que hagan esto mismo y que traten con tacto y ética las noticias sobre violencia de género porque el foco debe estar SIEMPRE en el maltratador.
El apoyo y atención a las víctimas es fundamental, por ello reclamamos que se aprovechen los fondos del Pacto de Estado para implantar una red de atención de proximidad potente que permita a las mujeres recibir los apoyos que necesitan. Necesitamos que se pongan en marcha YA en todas las provincias, también en Palencia, los centros de atención a las víctimas las 24 horas.
Somos abolicionistas de la prostitución y por eso consideramos necesario más recursos destinados a que las mujeres salgan de esa situación de prostitución.
Salimos a la calle este 25N para recordar a los distintos gobiernos, central, autonómico y local, la urgente necesidad de poner en marcha una agenda feminista, porque el capitalismo depredador y especulativo impide el acceso a la vivienda, donde el 60% de los hogares de alquiler encabezados por mujeres se sitúa por debajo del umbral de la pobreza.
Seguimos luchando contra un sistema que perpetúa las desigualdades de clase y fomenta la violencia estructural contra las mujeres; mujeres trabajadoras, precarizadas y empobrecidas, que subsisten en condiciones de explotación.
Demandamos un sistema público-comunitario de cuidados que asuma el trabajo no pagado que hacen las mujeres en la familia, y que son un síntoma de los privilegios de los que se sirve el patriarcado para mantenerse.
Exigimos disminuir la pobreza energética que incide más en las mujeres porque la inmensa mayoría de las familias monomarentales están encabezadas por mujeres con hijos e hijas menores de edad.
Manifestémonos hoy y todos los días, porque el 25N no acaba aquí. Empieza cada vez que nos insultan, que nos menosprecian, que nos hacen daño pero... ¡¡no estamos solas!! y ¡¡nos van a tener que escuchar!!
¡¡VIVA EL FEMINISMO!!
¡¡VIVA LA LIBERTAD!!
¡¡VIVAN LAS MUJERES, NOS QUEREMOS VIVAS Y LIBRES!!"