"Ningún trabajo te engancha como la mina": cinco mineros recuerdan por Santa Bárbara como era su vida en la bocamina de Salgueiro
Las cuencas mineras rinden homenaje a su patrona ya sin minas y mineros
Ponferrada
Las cuencas mineras rinden este 4 de diciembre honor a su patrona Santa Bárbara. Lo hacen sin minas y sin mineros, pero con el mismo sentimiento de respeto a una forma de vida que hoy recuerdan cinco de ellos desde la bocamina de Salgueiro, la última mina que cerró en España. Raúl Castro, Alider Presa, José Payero, Carlos Casado y Alfonso Presa formaron parte de los 200 trabajadores que llegó a tener Salgueiro a finales de los 80, y que cerró el 16 de noviembre de 2018 cuando solo conservaba ya a medio centenar de mineros.
"Solo quien cruza una bocamina nota como las galerías siguen en sus ojos cuando se cierran", explican. Necesitaban 50 minutos para entrar en la mina y otros 50 para salir. Todos tenían entonces el mismo pensamiento: "Que no te ocurriese nada, porque para sacarte era mucho peor". Los cinco -un capataz, un ayudante de minero, un maquinista de tracción, un picador y un posteador- recuerdan cómo fueron sus primeros días. "El primer día que entré y escuché el ruido de los martillos, me temblaban las piernas", señala uno de ellos. "Mi familia me dejó de hablar porque no querían que trabajara allí", resaltaba otro ellos.
Con el paso de los años, muchos de ellos fueron testigos en la mina de la pérdida de algún compañero. Uno de ellos fue Jose Pereira, que perdió la vida a los 42 años en 2015. Su emotivo adiós sumió a compañeros y familiares en un luto que enmudeció a las calles. Tres años después, Salgueiro fue la última mina en echar el cierre.
En la actualidad, el carbón está más caro que nunca: el precio medio de la tonelada de carbón térmico internacional ronda los 750 euros y la tonelada de grano de calefacción supera los 500 euros, pero Santa Bárbara "está en paro". Las explotaciones mineras fueron cerrando para evitar que los empresarios tuviesen que devolver las ayudas al carbón que habían recibido desde el año 2011 y que suponían un desembolso, en todo el sector, de 500 millones de euros. En 2018, tal y como recogía el Plan Marco, fueron clausurando una a una las últimas 12 minas que quedaban en producción entre Aragón, Asturias y Castilla y León.
Más de seis años después, los mineros insisten en que ningún trabajo es "más bonito" ni "engancha tanto" como la mina. Para ellos, era, de alguna manera, la envidia del resto de sectores por su capacidad de "movilización" y de "lucha" por sus derechos".
