"Es fundamental concienciar a nuestros mayores de los riesgos de ser víctimas de hurtos o estafas"
La Policía Nacional insite en la necesidad de hacer labor pedagógica con ellos ya que los delincuentes aprovechan la especial vulnerabilidad que presentan
"Es fundamental concienciar a nuestros mayores de los riesgos de ser víctimas de hurtos o estafas"
Palencia
Las personas mayores son, de manera potencial, más propensos a ser víctimas de hurtos o estafas debido a la situación de vulnerabilidad que presentan, por ello hacen un llamamiento a su entorno más cercano a llevar a cabo una labor pedagógica con ellos para que no sean tan confiados y así tratar de evitar que sufran alguno de estos delitos que proliferan en los últimos años. Uno de los casos más claros son los hurtos o estafas en domicilios, para ello lo primero es que no se abra la puerta a nadie que no se conozca, que no se den datos vía telefónica ni pistas de que se vive solo. Generalmente, los delincuentes aprovechan esta información para presentarse en las casas como técnicos de empresas suministradoras y, con la excusa de hacer una revisión un cómplice aprovecha la oportunidad para deslizarse al interior de la vivienda para llevar a cabo el hurto, por ello es fundamental no confiar en personas desconocidas, no realizar transferencias bancarias en el momento para el pago de la revisión o firmar ningún documento sin la presencia de alguien de confianza.
Otro de los delitos que, aunque pensemos que se había erradicado, se sigue dando es el del "Tocomocho", uno recientemente en Palencia en el que, generalmente, ofrecen un décimo de lotería premiado por un importe algo menor que el del premio, llegando incluso a mostrar en el móvil una imagen de, supuestamente, la página oficial de Loterías y Apuestas en que aparece ese número como premiado. Aprovechan la confusión y la necesidad de una transacción rápida para cometer el timo.
Igualmente, el inspector de Policía Nacional, Jaime Merino, recuerda extremar la prudencia a la hora de acudir al banco a sacar dinero o a efectuar alguna operación en el cajero automático desconfiando de la excesiva cercanía de otra persona y, acudiendo a los empleados de la sucursal en caso de necesitar ayuda. Tanto en este caso como en los conocidos como Hurtos Amorosos, los delincuentes se acercan con motivos poco claros, como que le recuerdan a un familiar, les piden algún favor o entablan una conversación que finalizan pidiendo dar un abrazo, momento que aprovechan para robar las joyas que lleven puestas o el dinero, llegando al tirón en caso de resistirse la víctima.
Y es que, la vulnerabilidad de los mayores es aprovechado en demasiadas ocasiones por los delincuentes para elegirlos como víctimas de ahí, la importancia de la labor pedagógica a desarrollar por su entorno para concienciarles de no confiar en desconocidos y, en caso de ser víctimas de uno de estos timos o hurtos acudir inmediatamente a denunciar o, llamar al 091.