Visto para sentencia el juicio por el abuso sexual a una joven que era menor de edad cuando se produjeron los hechos

Queda visto para sentencia el juicio por abusos sexuales en el que la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Zamora pide 14 años de cárcel para un vecino de la ciudad, de iniciales A.L.G.H., que supuestamente habría agredido sexualmente en reiteradas ocasiones a una menor, hija de su mejor amigo, cuando esta tenía entre 13 y 14 años, llegando incluso a la penetración con los dedos. Los hechos habrían sucedido entre el 1 de julio de 2017 y 1 de julio de 2018, aunque la denuncia no se presentó hasta diciembre de 2021.

En esta segunda jornada del juicio ha tenido lugar la declaración del acusado, el lunes fue el turno de la supuesta víctima y los peritos. En el testimonio del hombre, que era considerado como una especie de abuelo postizo según definió la propia denunciante, negó haber realizado tocamientos a la por entonces adolescente, así como tampoco que pasara tiempo a solas con ella. Por otro lado, achaca las acusaciones de la ahora joven de 21 años a una necesidad de llamada de atención, ya que en 2018 el acusado fue abuelo por primera vez y dejó de pasar tanto tiempo con la denunciante. Igualmente, ha querido desmentir que en algunas fechas en las que se le imputan las agresiones sexuales, como el 1 de julio de 2017, él hubiera visto a la entonces menor, ya que la geolocalización de su móvil, según ha expuesto la defensa, lo sitúa en ubicaciones diferentes a la de de la denunciante.

Argumentos que no han hecho variar el parecer de la Fiscalía, que, como expresó durante sus conclusiones, considera que las declaraciones de la supuesta víctima son abundantes y aclaratorias. Igualmente, considera que las pruebas periciales de los especialistas médicos, psicóloga y psiquiatra, corroboran que la menor presentaba síntomas coincidentes con el abuso sexual. Por todo ello, la Fiscalía mantiene su petición de 14 años de cárcel y 10.000 euros de multa en concepto de indemnización. La acusación particular eleva esa petición a los 21 años y los 60.000 euros

Argumentos que la defensa, en su turno de conclusiones, ha tratado de rebatir con una prolija exposición de fechas que no coincidían con las declaradas por la joven. Igualmente el letrado del acusado quiso destacar dos puntos: por un lado, que la denunciante, según la Defensa, nunca especificó hasta este juicio que el acusado la hubiera penetrado.

La joven ya declaró que no lo dijo por vergüenza a verbalizarlo y miedo a no ser creída por su padre. Y continuó el abogado defensor precisando que la denunciante dejó de asistir a las consultas de la psiquiatra y la psicóloga tras unos pocos días, donde no quiso hacer referencia a esos abusos. Asimismo, arguye la Defensa la imposibilidad, a su juicio, de que el acusado pudiera penetrar con las manos a la menor en un coche en el que también viajaban el padre de esta y la mujer del denunciado. Ahora, la joven vive fuera de la comunidad, porque, según explican fuentes cercanas a la acusada, el trauma le ha impedido hacer vida normal en Zamora.