Subdelegación y ayuntamiento de Soria resuelven los malos olores en el entorno del Virgen del Mirón
El problema se encontraba en el colector del centro penitenciario, sobredimensionado

Crónica sobre el fin de los olores en El Mirón-José Carlos San José
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Soria
Los problemas de olores en el entorno de la Virgen del Mirón en Soria que se detectaron a finales del pasado año se han solucionado definitivamente tras corregir los problemas del colector del centro penitenciario, causantes de la situación.
Una vez que se dio con el origen de las molestias de las que se llevaban quejando los vecinos de la zona algún tiempo, se actuó de forma conjunta entre varias administraciones para poder poner fin al problema, tal y como explica el subdelegado del gobierno en Soria, Miguel La Torre, “se realizaron una serie de intervenciones allí en origen, en el mismo centro penitenciario, en el marco de una colaboración muy estrecha entre el ayuntamiento de Soria, Aguas de Soria, el centro penitenciario y SIEPSE, que fue la empresa que coordinó la construcción del centro y esta misma subdelegación, y por las noticias que tengo, ha sido la solución que se adoptó muy efectiva”.
Apunta el responsable gubernamental a que ya se ha zanjado la cuestión de los olores, aunque hubo un pequeño capítulo aislado consecuencia de otra avería también solventada. “Quitando, como digo, momentos puntuales que por fallos que no son achacables al propio funcionamiento del sistema, en este caso fue una falta de suministro, parece que la cosa funciona. Vamos a seguir analizando y monitorizando en contacto, tanto con los vecinos como con el resto de empresas e instituciones implicadas y esperemos que la cosa continúe así”.
La concejala de Servicios Locales del ayuntamiento de la capital, Ana Alegre, se congratula también de haber encontrado el problema y ejecutado la solución para bien de los vecinos. “También gracias a esa colaboración siempre de los vecinos, que estamos en continuo contacto, ellos nos llaman y nosotros hablamos con ellos; esto viene derivado de la cárcel, de la capacidad que tiene la cárcel, a no tener tanta gente se provocaba ese estancamiento de las aguas sucias y lo que hemos tenido que hacer es echar unos productos y yo creo que es la solución definitiva”.
En cualquier caso, insiste Alegre, lo importante es haber detectado el origen de los problemas, por lo que si en el futuro, ante un incremento de población en el centro penitenciario, se volviera a dar la situación, se podrá actuar rápidamente. “Claro, yo creo que eso es lo bueno, que lo hemos encontrado y de momento es la solución y por lo que dicen los técnicos, por lo que dicen los vecinos también, funciona y yo creo que esta vez hemos acertado y creo que bueno, que se ve bien el trabajo que se ha hecho”.

Isabel G. Villarroel
Jefa de informativos de SER Soria.




