Un proyecto de incineradora de la Junta provoca un nuevo desencuentro entre el tripartito arandino y el grupo Popular

Aranda de Duero

El equipo de gobierno municipal arandino se posiciona en contra de las intenciones de la Junta de Castilla y León de construir una incineradora de residuos y recrimina al concejal popular José María Jimeno Pardo que, como representante del Ayuntamiento en el Consorcio Provincial de Residuos, haya votado a favor de iniciar el expediente de un convenio de colaboración para este proyecto sin informar al resto de la Corporación municipal.

El portavoz del tripartito y el concejal de Medio Ambiente informaban este martes de este nuevo episodio que vuelve a evidenciar la brecha entre el equipo de gobierno y la oposición y la falta de diálogo entre ambas.

El representante del Ayuntamiento de Miranda de Ebro fue el único que votó en contra del inicio de los trámites de este convenio que la administración regional plantea a 40 años para la creación y gestión de una planta de valorización energética o, lo que es lo mismo, una macro incineradora para producir energía con los residuos que no se pueden reciclar. Carlos Medina Martín, que dice haber tenido acceso a este proyecto de forma extraoficial, considera que esta medida es empezar la casa por el tejado, quejándose de que en vez de intenta reducir el volumen de residuos y apostar, en cualquier caso, por su reutilización o su reciclado, lo que parece que más le interesa a la Junta es la producción de energía. "No se está respetando esas jerarquía de medidas de gestión, porque entendemos que si la filosofía de la ley es que lo primero que hay que hacer es trabajar para una reducción de residuos, que la primera medida de calado que se esté planteando sea apostar por una macroplanta para la valoración energética es un error", razona el edil de Medio Ambiente. "No se está adoptando ninguna medida por parte del consorcio provincial para trabajar en esta línea y ya estamos apostando por lo que sería la cuarta de la jerarquía; aquí lo que se plantea es crear una única infraestructura centralizada que recoja los residuos de toda Castilla y León para su incineración y que vamos en dirección contraria a la ley", añade.

El edil de IU habla también del impacto económico de esta medida, en la que no está claro quién paga el transporte de los residuos hasta la planta, de la que aún se desconoce qué ubicación tendría, sin menoscabo de la huella de CO2 que suponen esos desplazamientos. Medina Martín considera que "hay mucha letra pequeña y cabos sueltos" en esta propuesta, de la que, en cualquier caso, entiende que el edil popular debería haber mantenido informado al Ayuntamiento, en vez de actuar una vez más de forma independiente. "Estamos viendo desde hace tiempo que en contra nuestro criterio, la representación en el consorcio que tiene Aranda de Duero actúa de manera independiente; ya lo vimos en el pleno del mes de febrero que esto venía siendo una costumbre habitual y nosotros queremos dejar claro que en este caso no se cuenta ni con nuestro apoyo ni con nuestra colaboración para una propuesta que entendemos que por sus características debería de venir mucho más trabajada, mucho más informada y debería de contar con más datos encima de la mesa antes que desde Aranda queramos dar el visto bueno a la propuesta", concluye.

La postura contraria del tripartito ante esta propuesta de la Junta es que parece incumplir el concepto de potenciar que el que menos contamine menos pague, dando preferencia a la viabilidad económica de la planta frente al reciclaje de residuos.