La Arandina cae en Burgos con honor y se despide de una temporada para olvidar

Aranda de Duero

La Arandina Club de Fútbol atraviesa el peor momento de su historia pero puede sentir orgullo de unos jugadores y cuerpo técnico que, pese a no tener salvo varias excepciones raíces en la tierra, mostraron amor por los colores y lucharon pese a las trabas por seguir vivos en su lucha por el ascenso.

Porque el autobús (supuestamente pagado según el club) no se presentó en el Juan Carlos Higuero y tras 45 minutos de espera de jugadores y cuerpo técnico, decidieron viajar en sus propios coches. Dice la Arandina que no fue problema de la empresa, sino de un “fallo humano”.

Sea como fuera, y sin representación directiva aparentemente pero sí con medio centenar de aficionados y canteranos, los ribereños salieron a por el partido de este sábado en Castañares. Un partido que se puso cuesta arriba con el gol de Ethan, pero al que reaccionó al instante el cuadro de Sesi con el tanto de David Sanz al rechace en el ecuador del primer tiempo (1-1). Poco más hubo que contar hasta el descanso.

En la reanudación el Burgos dio un paso al frente decisivo. Muchos remates claros a puerta de los blanquinegros que sondearon mejor sus opciones y que se encontraron con el segundo tanto que anotó Iván de cabeza en un córner. La reacción de los ribereños fue buena, en acciones de Pablo Ortiz primero y luego Omar. Pero tocó exponerse demasiado, y los locales lo supieron hacer pagar con el definitivo tanto de Sagredo. 3-1. Antes, los blanquiazules se habían quedado con uno menos, con la expulsión de Albín cortando una contra.

Con este resultado acaba una temporada aciaga para un equipo que hasta la situación de los impagos fue campeón de invierno pero al que la situación extradeportiva lastró. Acaba un año aciago y con la pregunta rondando de… ¿Y ahora, qué?