El 78% de los consumidores españoles estaría dispuesto a probar vino sin alcohol, según un estudio de la Universidad de León

León

Un estudio de la Universidad de León revela que el 78% de los consumidores estarían dispuestos a probar vino sin alcohol, principalmente por motivos de salud. Se trata de una de las conclusiones del informe pionero realizado por los profesores de marketing y economía de la Universidad de León, Rosana Fuentes y José Luis del Campo, que se presentará este jueves en la jornada ‘Wine Land’, en la localidad riojana de Haro.

"Con la nueva normativa europea que permite etiquetar como vino a los productos desalcoholizados, se abren nuevas oportunidades de mercado", afirma Rosana Fuentes, quien considera que estos caldos representan “una revolución silenciosa que puede marcar el futuro del sector” y que hasta ahora no había sido estudiada en profundidad desde España.

Este estudio, titulado ‘Estudio sobre el mercado del vino desalcoholizado en España: tendencias de salud, demografía y el papel de las nuevas preferencias de los consumidores’, pone el foco en el potencial de estos productos para conectar con un nuevo perfil de consumidor. De hecho, el porcentaje de personas dispuestas a probar vinos sin alcohol se eleva hasta casi el 88% en el caso de jóvenes de entre 18 y 35 años. “Beben menos, pero eligen mejor, buscan salud, sostenibilidad y autenticidad”, explica la investigadora, quien destaca también el papel relevante de las mujeres en este cambio de hábitos: el 84% mostró interés en probar vinos desalcoholizados y el 74% se mostró dispuesta a incorporarlos a sus hábitos de consumo.

Por eso, el estudio concluye que los vinos sin alcohol no suponen una amenaza para el sector tradicional, sino que son “una nueva forma de conectar con quienes antes no encontraban su sitio en el mundo del vino”. Una reflexión que cobra aún más sentido si se tiene en cuenta que las bodegas españolas exportan el 60% de su producción a precios bajos, mientras el consumo interno sigue en descenso. “El mundo está cambiando y el vino no puede quedarse atrás”, subraya Fuentes.

Los investigadores destacan que este trabajo constituye el primer análisis en España con datos propios y metodología científica que estudia tanto la percepción de los consumidores como la de los productores. En este sentido, los vinos desalcoholizados aparecen como una vía para abrir nuevos mercados y responder a una tendencia al alza en muchos países, impulsada por hábitos de vida más saludables.