Gracias, SER

Palencia

Cuando te propone una emisora de radio como la SER de Palencia colaborar semanalmente con un pequeño artículo, y por lo tanto formar parte de esta familia que son técnicos, periodistas y oyentes, la alegría es inmensa pero también la responsabilidad. Soy un afortunado por haber tenido esa suerte y porque vosotros me hayáis permitido asomarme a esta ventana.

Quede claro que la SER siempre ha sido, es y será mi mejor compañera de viaje.

¿Recuerdan lo que pasó el 28 de abril, verdad? Toda España se apagó. Y lo único que se pudo encender durante bastantes horas fue el transistor, la radio a pilas. Ahí estaba ella para que los españoles pudiéramos seguir la información al instante. Muy equivocados están quienes llevan años intentando enterrar este medio de comunicación. Demostrado queda que ni las nuevas tecnologías han podido ni podrán con la radio, y con la SER.

Escuché a primeros de este mes de junio al director nacional de contenidos de la SER que esta emisora tiene pilares fundamentales como son la información y la vida. Yo digo que con eso, aderezado del talento y la ambición que hay entre los profesionales de esta casa no es de extrañar los excepcionales resultados a nivel de audiencias. ¡Gracias, SER Palencia!.