Cuatro pueblos de la Ribera se sumergen en la celebración de la PEPA

Ribera del Duero

La Ribera del Duero puede caracterizarse por ejemplos a seguir que redundan en un mundo rural repleto de conexiones, sinergias y oportunidades a través de los lazos de unión. Lejos de las rivalidades que a veces se atisban en los pueblos -muchas de ellas se remontan a décadas o siglos y en ocasiones se mantienen sin sentido alguno- en la comarca se dan otras relaciones que son todo lo contrario: de unidad. Y precisamente con la unidad de cuatro localidades (Fuentelisendo, Nava de Roa, San Martín de Rubiales y Valdezate) surgió un encuentro único: la PEPA.

Elba Aparicio, de La Carrasca de Nava de Roa, contaba esta semana en la SER que la iniciativa surgió hace unos años a raíz de un partido de fútbol. Jóvenes de Nava comenzaron a ponerse en contacto con chavales de otros pueblos, y la buena relación fue un espejo a seguir para montar un evento unitario. Con juegos y actividades cada año en una localidad que ejerce de anfitriona, se finaliza con una cena de fraternidad. Y de los 370 asistentes del primer año, la segunda edición superó la barrera de los 500. Y a eso apunta Valdezate en la tercera.

Mari Carmen, vecina de dicha localidad, se conoce de pe a pa (nunca mejor dicho) el cartel. “Está habiendo cambios en la asociación porque está entrando gente nueva pero nosotros estamos detrás ayudando”, expresa, desgranando todos los actos que tendrán lugar viernes y sábado.

La colaboración con otros municipios también se da (un ejemplo fue Villalba) con el préstamo de bancos y mesas, si bien de momento no han recibido peticiones de entrar en este grupo de localidades ejemplares. “Primero creemos que hay que consolidarlo”, sentencia Elba, en una conversación que puede reproducirse en el audio superior dentro del espacio Destino Ribera.