La Guardia Civil detiene a un vecino de la zona y trabajador forestal como autor del incendio de Mombeltrán

La Guardia Civil ha detenido a una persona acusada de provocar el incendio forestal declarado en Mombeltrán el pasado 29 de julio y que arrasó en torno a 2.200 hectáreas en un paraje de gran valor medioambiental y que afectó a varios municipios del Valle del Tiétar, según ha informado en nota de prensa la Guardia Civil.

Se trataría de un vecino de la zona, trabajador forestal que, tras la detención ha confesado la autoría de los hechos y según habría declarado durante la investigación se debería "a motivaciones laborales vinculadas a la extinción de incendios".

El presunto autor confeso del incendio ya ha pasado a disposición judicial y se encuentra detenido en los juzgados de Arenas de San Pedro según han indicado desde la delegación del gobierno de Castilla y León.

Investigación policial

La inspección técnico-ocular del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, realizada junto a la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) de la Junta de Castilla y León, reveló indicios claros de intencionalidad.

Una investigación, iniciada el 30 de julio, que incluyó la toma de declaraciones a vecinos y el análisis de varias líneas de investigación mediante un Equipo Multidisciplinar con varias unidades de la Guardia Civil de Ávila.

Las investigaciones policiales se centraron en un hombre que la Guardia Civil identificó el pasado 31 de julio, cuando se dirigía a Cuevas del Valle, el cual realizó maniobras evasivas cuando se percató de la presencia policial.

Posteriormente, tras recabar indicios y pruebas periciales suficientes, en sede policial se llevó a cabo la correspondiente toma de manifestación a dicha persona, hasta que finalmente confesó haber provocado el fuego.

Las pesquisas apuntan a que la motivación podría estar vinculada a intereses laborales, dado que el detenido trabajó anteriormente en labores de extinción y obtuvo trabajo diez días después de haberse originado el incendio.

La Guardia Civil ha puesto a esta persona a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Guardia de Arenas de San Pedro (Ávila) y de la Fiscalía Provincial de Medio Ambiente y Urbanismo.

La operación ha sido desarrollada por efectivos del Seprona, incluido un equipo Unidad Central Operativa de Medio Ambiente (UCOMA), una unidad especializada de la Guardia Civil, dentro del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) cuya función principal es investigar y perseguir delitos ambientales graves, actuando como policía judicial especializada en protección de la naturaleza y conservación del medio ambiente. Además de la colaboración de la Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia (USECIC), el Servicio de Información de la Comandancia de Ávila y personal técnico de la Junta de Castilla y León.

Nicanor Sen, delegado del gobierno en Castilla y León, ha resaltado el trabajo realizado "por la Guardia Civil" así como "la rapidez y la diligencia" con la que se ha llevado una investigación que comenzó "con el incendio aún activo"

Alfonso Fernández Mañueco durante una comparecencia en León, donde ya apuntaba la detención de esta persona, ha asegurado que esta operación es un "ejemplo" que certifica las declaraciones que se hacen desde las administraciones en las que se apuntan a la "intencionalidad de los incendios, con una intencionalidad maliciosa y dañina" tanto en la provincia de Ávila como en otras de Castilla y León.

Recordar que el incendio comenzaba a las 23:10 horas de la noche del lunes, a unos 300 metros de la carretera N-502, en una zona forestal arbolada de mucha vegetación entre las localidades de Cuevas del Valle y Mombeltrán y se propagó rápidamente por el viento. Desde un primer momento se apunto a la intencionalidad de un incendio que obligó a confinar a los vecinos de Mombeltrán, en dos ocasiones, y de El Arenal afectando también al término municipal de Arenas de San Pedro.

Sobre el origen del incendio, también se apuntó a las coincidencias "muy llamativas" con otro incendio ocurrido hace 16 años en esa misma zona, también de origen intencionado, y que también había provocado mucho daño al monte. En ambos casos, se insistió en que la persona que estaba detrás había actuado con "intención de hacer mucho daño al monte, a las personas y al territorio".

Entre esas coincidencias e indicios, se apuntó a la "coincidencia temporal" con el incendio de 2009, tanto en el día, el mes y la hora, que en ambos casos fue "absolutamente intempestiva para que pudiera intervenir un operativo, al lado de una carretera nacional, sin maquinaria que pudiera provocar chispas y sin que en ese momento hubiera algún elemento incendiario que pudiera provocar un incendio fortuito ni natural".