Los vecinos de Urraca Miguel vuelven a casa, se restablece la circulación ferroviaria y abre la AV-500

La buena evolución del incendio forestal que se iniciaba en el mediodía de ayer en el Alto de Valdelavía ha permitido que a última hora de hoy sábado se haya podido producir una desescalada en las medidas que se habían adoptado, entre ellas la vuelta a casa del casi centenar de vecinos de Urraca-Miguel que permanecían evacuados, la apertura de la carretera el El Espinar, la AV-500, que había permanecido cortada desde la tarde de ayer y duranta la jornada de hoy y también el restablecimiento progresivo de los servicios ferroviarios del tramo entre Ávila y La Cañada y de ambas localidades con la capital de España.

Medidas todas ellas que se habían adoptado el viernes pero que, tras el descenso de la peligrosidad del incendio de El Herradón de Pinares, ha permitido al CECOPI rebajar el mismo a nivel 1, según ha dado a conocer el delegado de la Junta, José Francisco Hernández Herrero.

Tras una intensa jornada de trabajo, donde el operativo ha tenido que hacer frente a algún rebrote, el trabajo se ha centrado en conseguir el cierre completo del perímetro, según ha explicado el jefe de jornada del operativo, Pablo José Montejo, quien ha destacado que “el día ha evolucionado bien”, donde se ha coordinado y combinado el trabajo del operativo terrestre con los medios aéreos de manera que se ha podido “controlar los puntos activos”.

El punto más conflictivo ha sido una pequeña reproducción en la zona comprendida entre Urraca-Miguel y el Centro de Tratamiento de Residuos (CTR) “cuyos rebrotes se han podido atacar a tiempo y controlar los puntos activos”.

Un punto clave para el éxito ha sido el avance de los trabajos de perimetración que se estaban realizando en la zona con maquinaria pesada, en concreto con un bulldozer, que ha finalizado de realizar el tramo que faltaba sin perimetrar. “Una vez que ha terminado la pasada del bulldozer en ese tramo, que estaba sin perimetrar, y que unía el pueblo de Urraca Miguel con el CTR, se ha propuesto el realojo de la población".

Aunque el incendio está estabilizado aún queda un intenso trabajo por delante según ha avanzado Montejo ya que, las previsiones meteorológicas apuntan a temperaturas muy elevadas en los próximos días. El director del operativo confía en que “como el incendio está perimetrado ya en su totalidad, no haya nuevas reproducciones, o si se producen, que sean dentro del perímetro del incendio”.

“Durante los próximos días se seguirán las labores de refresco, las labores de vigilancia y habrá presencia de un importante operativo para acabar de controlar y sofocar definitivamente el incendio forestal”, ha declarado Hernández Herrero, al tiempo que ha agradecido el trabajo del conjunto del operativo que ha intervenido en el incendio y que ha aglutinado a más de 500 personas de la Unidad Militar de Emergencias, medios de las comunidades de Castilla y León, Castilla-La Mancha y Madrid, junto con los bomberos de Ávila, agrupaciones de Protección Civil y Cruz Roja así como efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Local.

El incendio ha arrasado 3.000 hectáreas, fundamentalmente de pastos y matorral, en un perímetro que alcanzó los 30 kilómetros con un frente de diez kilómetros.

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Trabajos para evitar que las cenizas lleguen a Serones

Y mientras el operativo antiincendios trabaja en la extinción, hasta Ávila ha llegado el cuerpo de ingenieros del Ejército de Tierra, de la base de Salamanca, para trabajar con dos bulldozers realizando zanjas como parte de los trabajos que se desarrollan para evitar que, en caso de lluvia, las cenizas lleguen al embalse de Serones y contaminen el agua del que se suministra la ciudad.

El regimiento de ingenieros de Salamanca colaborarán con el Ayuntamiento de Ávila en tareas que permitan mantener el suministro de agua sin afección por los incendios próximos al embalse que abastece a la ciudad.