El humo llega a las Cortes de Castilla y León junto a bomberos forestales que no pararán hasta que "los responsables dimitan"

Valladolid

Entre el humo y a gritos, más de 500 personas han pedido la dimisión de los responsables autonómicos por la gestión de los incendios que este mes de agosto han arrasado Castilla y León. Cánticos convocados por 18 asociaciones, sindicatos y partidos políticos acompañados de ciudadanos y bomberos que, a gritos, proclaman insultos contra los máximos tres responsables del "abandono a los pueblos y a los bomberos".

Las peticiones de dimisión empiezan por el máximo responsable, el consejero de Medioambiente, Juan Carlos Suárez Quiñones; siguen por el cese del Director General de Patrimonio Cultural y Política Forestal, José Ángel Arranz; y por último, de quien ha dado la cara por el consejero durante la peor crisis del gobierno autonómico en esta legislatura, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.

Frente a la puerta de las Cortes de Castilla y León, con la ceniza volando alrededor del parlamento, el Responsable Federal de Bomberos de UGT en Castilla y León, asevera que "los incendios matan, la precariedad mata. Se prioriza lo privado ante lo público y lo económico ante el servicio. La extinción y la prevención de incendios forestales deben ser un servicio público y Castilla y León es la comunidad que más privatizado tiene el servicio. No podemos seguir manteniendo este operativo, debemos de cambiar el sistema de manera inmediata, nos deben de escuchar".

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A su lado, Sara Mateos, agente medioambiental y responsable de CSIF en la comunidad, vuelve hoy a dar la cara ante los medios para mañana regresar al puesto de mando, como lleva haciendo semanas, desde el inicio de todo, desde antes de que, como ella ha denunciado, el día 9 de agosto el operativo de incendios de Castilla y León "colapsase".

"No vamos a consentir que nuestros dirigentes políticos nos hagan ver una realidad distinta a la que hemos visto los que estamos luchando contra las llamas. Esto se podría haber evitado. Si hubiera habido medios estos incendios no se hubiesen hecho así de grandes".

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Desde el Sindicato de Agentes Medioambientales de Castilla y León, Esau Escolar, acompañado del movimiento ciudadano que cubre sus espaldas, asegura que "el operativo de esta comunidad es seguramente el más privatizado de España". El agente, además de pedir responsabilidades políticas por la "mala gestión" que asegura, "todos hemos podido comprobar", denuncia que los responsables "saben donde se hacen las inversiones y quienes se están llevando los beneficios por detrás".

Las convocantes piden un operativo público durante todo el año, personal suficiente y sobre todo un mayor presupuesto en prevención, porque aseguran que, según los datos, "por no haber invertido suficiente en prevención, nos vamos a tener que gastar diez veces más en extinción".

Uno de los responsables de varios de los puestos de mando activos ahora mismo en varias provincias de la comunidad, Agustín Argulo, quien como Sara Mateos desde el CSIF, lleva desde el inicio de los incendios entre las llamas y los micrófonos para dar voz a los trabajadores forestales y medioambientales. En exclusiva para la Cadena SER, lamenta emocionado, que "no se ha reconocido, en un momento dado, que no teníamos medios suficientes y eso ha retrasado la ayuda".

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Ambos, Sara Mateos y Agustín Argulo, han sido expulsados del hemiciclo, por gritar "Quiñones dimisión", durante una de las intervenciones del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ya que está prohibido hacer cualquier comentario o gesto reivindicativo desde la tribuna de invitados.