Villamanín recupera la calma tras un fin de semana de tensión por culpa del fuego
El alcalde lamenta que su municipio no cuente con un pabellón cubierto que sirva para atender a la población en caso de emergencia

El incendio de Villamanín amenazó durante horas a la población de Tonín de Arbas

León
Aunque el incendio declarado en la zona de Pendilla continúa activo, la situación en Villamanín es hoy de tranquilidad tras un fin de semana complicado.
El fuego se inició en la medianoche del viernes y llegó a alcanzar el nivel dos de peligrosidad al amenazar al pueblo de Tonín de Arbas. Sus veinte vecinos tuvieron que ser desalojados de manera preventiva. Finalmente, todos pudieron alojarse en sus residencias habituales o en viviendas de familiares cercanos.
El alcalde de Villamanín, Álvaro Barreales, ha lamentado que el municipio no disponga de un pabellón cubierto para acoger a la población en casos de emergencia. Explicó que en esta ocasión se valoró el traslado de los afectados al albergue local, con capacidad para cincuenta personas, aunque se trata de una instalación de gestión privada. La casualidad quiso que estuviera libre, algo que —según señaló— no siempre sucede.
El regidor volvió a reclamar también mejoras en las carreteras que comunican los pueblos del municipio. Son vías estrechas que este mismo fin de semana dificultaron el paso de la maquinaria pesada durante las labores de extinción.
El incendio bajó a nivel cero el domingo, una vez desaparecido el riesgo para núcleos habitados. Todo apunta a que el origen fue intencionado, ya que se han detectado hasta siete focos diferentes.

María García Beberide
Periodista. Contando historias en la radio desde 2002. Tras aprender el oficio en Radio Bierzo, aterriza...




