Sociedad

Las personas sordas, ante una sociedad en la que aún no están plenamente integradas: "Pedimos que la gente piense cómo sería un día sin sonidos"

En la semana internacional de las personas sordas nos acercamos tanto a este colectivo como a la lengua de signos

Las personas sordas, ante una sociedad en la que aún no están plenamente integradas

Peñafiel

Este 23 de septiembre celebramos el Día de las Personas Sordas, un colectivo que a día de hoy prosigue en esa lucha de lograr una mayor visibilidad e integración en el día a día. Los datos del INE establecían hace más de una década que había en España más de 1 millón de personas sordas o con algún tipo de discapacidad auditiva, y se antoja clave la lucha en el día a día para que su presencia en la sociedad no les excluya de ninguna situación o acto.

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Dentro de la Confederación Estatal de Personas Sordas, organización sin ánimo de lucro que atiende y canaliza los intereses de las personas sordas y sus problemas, se encuentra la Federación de asociaciones de personas sordas de Castilla y León, a la que hemos conocido de cerca junto a su presidenta, María Rosa Galván. También nos ha acompañado Amaia Maortua, profesora de Lengua de Signos Española y técnico de envejecimiento activo y mayores. Con ambas hablamos a través de una intérprete de lengua de signos, una figura clave cuya relevancia se entiende conforme avanza la entrevista.

"Falta la figura del intérprete, sobre todo en las escuelas"

"Hay 11.500 personas sordas en Castilla y León, con certificado, pero hay quienes no están contabilizadas porque tienen problemas de audición pero no están diagnosticadas, y el número podría ser mayor", detallan, explicando que se ha mejorado en invención y atención, pero que la adaptación de la sociedad a su realidad está demasiado alejada. "No se ha hecho lo suficiente. Aún falta sensibilización. En el ámbito educativo se conoce el concepto de sordera pero no en profundidad. Se le proporciona un intérprete al alumnado sordo, pero no es suficiente, y a veces no está siquiera todas las horas. A nivel social por lo general no se conoce la sordera. Falta sobre todo la figura de intérprete, en el ámbito sanitario es importante. Yo voy al médico con ella y se dirige a ella, cuando soy yo la paciente. La vida que hacemos es normal, pero el recurso del intérprete en cualquier gestión es necesaria", añaden, animando a la gente a aprender este idioma. "Es un idioma más, un lenguaje maravilloso. Yo me emocioné hace poco al ir al supermercado; la cajera sabía decir hola y gracias. Con pasos de tortuga, se mejoran los entornos en los que nos movemos", reflejan.

En el medio rural, más difícil todavía

La situación se complica a mayores para quienes viven en el medio rural. "Las personas sordas en pueblos están abandonadas y aisladas. Las familias además no tienen forma de comunicarse, ni han desarrollado una lengua de signos. Nos preocupa mucho el aislamiento que sufren", añade.

Y en cuanto a las necesidades más acuciantes, reflejan, ha de ser "el intérprete en el ámbito educativo para estar en igualdad de condiciones", y "en el ámbito sanitario, porque si como madre, mi hijo tiene una una emergencia a las cuatro de la mañana, me tengo que buscar la vida para comunicarme", e incluso una mayor adaptación en medios como la televisión "porque los subtítulos no siempre se entienden".

Bajo la petición de que no se excluyan a las personas sordas, desde el colectivo pidan a la gente "cómo sería un día sin sonidos" para poder entender lo que todas estas personas viven en su día a día. La charla al completo puede reproducirse en el audio superior.

Jorge Alvarado

Periodista. Responsable Digital de la SER en...