La Arandina cambia por completo su estructura directiva y mira hacia un futuro amparado por el Racing City Group

Aranda de Duero

Tras unos años recientes de futuro incierto, desencuentros, y una gestión que derivó al club a una situación inédita en su historia, la Arandina se reinventa con la entrada del Racing City Group, que ya es una realidad. También a nivel 'social'. Demetrio Rodríguez va a seguir siendo el presidente de la entidad, porque sigue siendo un club de socios. Pero los socios asistentes -22 presenciales y 11 con voto delegado- aceptaron el cambio en la Junta Directiva, de la que desaparecen Patricia del Cura y Christian Monzón, y a la que se integran perfiles asociados a este organismo futbolístico.

Junto a Demetrio Rodríguez, que abría la asamblea extraordinaria dando las gracias al Racing City Group en un mensaje leído, el encargado de dirigir la sesión fue el responsable jurídico de este último. Los socios presentes, salvo por una abstención, aprobaban por mayoría el cambio en la Junta Directiva, que pasa a presidir Morris Piagnello, con la vicepresidencia del ex jugador del Real Madrid Rubén de la Red, también presente. Hay otros tantos cargos (secretario, vicepresidente primero y segundo, y tesorero, que recaen en otras tantas personas asociadas a este grupo futbolístico).

En el segundo punto del día del ámbito extradeportivo, se trató la modificación del número de socio en los carnets (quienes renueven en tiempo y forma avanzará en el número de carnet, y quien no, perderá su número). Y ahí, tras un receso, proseguía la convocatoria con la asamblea ordinaria.

Proyecto deportivo y presupuesto

A las 20 horas se reanudaba la sesión, donde se desgranaba inicialmente el proyecto deportivo y organizativo de la temporada. Un proyecto que ha buscado la estabilización de la entidad, y que de cara al futuro, tratará de alcanzar el ascenso a Segunda RFEF en un par de temporadas, y en 5-6 años, poder estar en Primera RFEF.

Tras ratificar los presentes la campaña de socios ya presentada hace semanas, también se aprobaba el presupuesto de la entidad, que será de 350.000 euros. En él, tiene importancia capital las inyecciones del grupo, tanto para acabar con deudas de anteriores años, como para costear los gastos de esta temporada en cuanto a primer equipo se refiere. La intención, explicaban, es ir integrando a patrocinadores y volver a ser importante en la vida social de la localidad.

Reconstrucción de una base desaparecida

Sin lugar a dudas, una de las principales preocupaciones de los nuevos gestores del proyecto pasa a ser la reconstrucción de la cantera. Una cantera arrasada que deberá iniciarse de cero la próxima temporada. Y no será sencillo, teniendo en cuenta que hay otras dos instituciones de fútbol base en la localidad.

En definitiva, muchos retos y también novedades en una etapa que comienza -ahora ya sí con nombres, y objetivos claros- en la Arandina.