“Nadie me ha hecho sentirme inferior por ser mujer, ni tampoco lo permitiría”
Sonia Ruiz es empresaria en el mundo rural, en Ágreda y defiende el papel de la mujer al frente de las empresas

Sonia Ruiz (empresaria de Ágreda, Soria, en el día de la Mujer Rural) - “Nadie me ha hecho sentirme inferior por ser mujer, ni tampoco lo permitiría”
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Soria
Este miércoles 15 de septiembre se ha celebrado el día de la Mujer Rural y la provincia de Soria tiene muchos ejemplos de mujeres, al frente de proyectos, iniciativas y negocios en pueblos, rompiendo barreras y techos de cristal. Uno de esos ejemplos lo encontramos en la localidad de Ágreda, con Sonia Ruiz que, junto con su marido Félix Cacho, está al frente de Productos Cacho Ruiz, una joven y modesta empresa, de producción de torreznos frito tipo snack, que cuenta con tres trabajadores (el matrimonio y una empleada más) y que pelea por hacerse un hueco “en el sector nacional e internacional”, como explica la propia Sonia.
Empezamos justamente con la pandemia… Llevamos 5 años. Y vamos bien, estamos tirando, trabajamos bastante y nos dedicamos a lo que es la producción de torreznos frito tipo snack. Hacemos de distintos sabores: sabor natural, barbacoa, jamón ibérico y chile picante. Y todos, en distintos formatos: cubo, bolsas, enviamos a hostelería, a supermercados… Y ahora estamos enviando a Europa, a los Países Bajos. A ver si ahí encontramos también un tirón y podemos ampliar”, apunta esperanzada.
Reconoce que no es fácil seguir adelante, ya que se encuentran con “problemas comunes como falta de fibra óptica en el polígono”, pero también cuentan con apoyos como el de Proynerso (la Asociación para el Desarrollo Integral en el Noreste de Soria), en quien encuentran el “acompañamiento apropiado para informarse, asesorarse o acudir a líneas de ayudas y subvenciones” para las empresas del ámbito rural.
Sonia recuerda que su padre ya se dedicaba al sector cárnico, y que ella, desde pequeña se sintió atraída, le gustaba, y “tras estudiar empresariales en Zaragoza”, regresó a Ágreda, porque “prefería la vida del pueblo”. Como mujer, asegura, no se ha encontrado con impedimentos especiales. “En mi experiencia, en lo que a mí se refiere, yo no encuentro impedimentos, yo no. No sé, a lo mejor es que me da igual, o sea, que me digan cualquier cosa… No tengo ningún tipo de complejo, yo voy para adelante y hasta el momento todo el mundo me respeta”, asegura.
Insiste en su forma de ver el panorama: “Yo no sé los demás, las demás, pero me da igual, a si hombre o mujer. Para mí, depende de lo que tú te creas, sigo para adelante, nadie me ha hecho sentirme inferior por ser mujer, ni tampoco lo permitiría, ¿sabes? Que siendo mujer me siento muy orgullosa, estoy muy contenta y no he encontrado impedimentos”.
Hermanas emprendedoras
Recalca que, tal vez la educación recibida ha sido clave para esa fortaleza y actitud, ya que comparte espíritu con sus dos hermanas. “Mi padre tenía una empresa de embutidos y somos tres hijas. Y las tres, de siempre hemos sido autónomas, las tres estamos trabajando: una en Ólvega, que tiene una clínica de medicina, es médico; luego mi hermana María, que está en Matalebreras, con una empresa de embutidos, Embutidos Orama, y yo, aquí en Ágreda. Y las tres siempre hemos estado al mando. No sé si a lo mejor también es porque nuestro padre nos ha inculcado que lo hemos visto y nos gusta y somos autónomas y luchamos, luchamos. No me quedo quieta que nadie venga a ofrecerme, sino que salimos y luchamos, ¿sabes? Que no es fácil”.

José C. San José
Palma de Mallorca, 1980. En Soria desde 1997. Licenciado en Periodismo. Disfrutando y narrando los Deportes...




