La falta de viviendas bloquea a las entidades que trabajan con personas sin hogar en Burgos

Burgos

Las entidades que trabajan con personas sin hogar en Burgos ven bloqueados sus recursos de acogida por la falta de vivienda asequible, ante una demanda creciente.

Reivindican más inversión a los poderes públicos a través de la campaña 'Nadie sin hogar'.

Cáritas, Fundación Lesmes y la Casa de Acogida San Vicente de Paúl, suman apenas un centenar de alojamientos que, por definición, son de carácter temporal, a la espera de que los usuarios encuentren cierta autonomía, lo que choca con la dificultad de acceso a una vivienda estable.

Pilar Martínez, responsable del Centro de Integración Social de Fundación Lesmes, habla de alquileres de 400 euros por una habitación y propietarios que ponen demasiados requisitos, además de la oferta ínfima de pisos sociales de iniciativa pública.

La ocupación en el Centro de Integración Social (CEIS), ha pasado del 60 al 70% este año, con una media de 30 usuarios para sus poco más de 40 plazas. La edad media ha bajado 3 puntos y está en 43 años. El 20% son mujeres y un 20% migrantes. Ha crecido de forma notable el número de personas con discapacidad, que alcanzan el 48% del total.

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Desde Cáritas, denuncian que la reforma de la Ley de Extranjería penaliza a los migrantes que solicitan asilo y restringe los permisos de protección, lo que ha provocado un aumento de la demanda de acogimientos en su albergue, habitualmente saturado.

David Polo, responsable del programa de Personas sin hogar de Cáritas Burgos, apunta el estrés que supone tener que dejar a la gente en la calle después de unos días en el albergue.

Cáritas Burgos ha acogido a más de 1.200 personas en su programa de Personas sin Hogar durante este año, de los que más del 40% son españoles y cerca de la mitad, extracomunitarios. Ha aumentado el perfil de menores de 36 años, que suponen ya el 34% de los que precisan un recurso habitacional.

'Sin hogar, pero con sueños' es el lema de la campaña de este año, que pretende visibilizar la esperanza truncada de quienes se enfrentan a las múltiples barreras desde la vulnerabilidad.

Mario Vivanco, delegado de Cáritas Burgos, explica que no es tan difícil caer en el sinhogarismo, cuando la estabilidad económica, social, familiar o laboral, se tambalea. Cuando desaparecen las redes de apoyo, cuando el sistema no responde, aparece la pesadilla que rompe los sueños.

La Plaza Mayor de Burgos, mañana a mediodía, será el escenario de una acción de visibilidad de esta realidad social de las personas sin hogar.