La población de la provincia mantiene su crecimiento por tercer año consecutivo gracias a la inmigración
La 'primavera demográfica' sopla, sobre todo, desde América Latina
La inmigración exterior, acelerada en los tres últimos años, está consiguiendo que aumente la población en Palencia / nico_blue
Palencia
Según la Estadística Continua de Población (ECP) publicada ayer por el INE referida a 1 de octubre de 2025, la población de Palencia ha crecido en los nueve primeros meses del año en 957 personas, situándose en 159.534 habitantes, y dejándonos a fin de año, previsiblemente a las puertas de recuperar la barrera de los 160.000 habitantes que habíamos perdido en 2.020, siempre según los datos extraídos por el sociólogo Javier Gómez Caloca.
Como viene sucediendo desde hace tres años, tras la pandemia, esta recuperación no tiene nada de milagrosa sino de foránea: en los primeros nueve meses de este año el incremento del número de habitantes de nacionalidad extranjera ha sido de +1.483, que amortiguan en parte, la pérdida constante de población de nacionalidad española que desde 2001 ha disminuido en 26.973 habitantes. Por el contrario, en lo que llevamos de siglo, la población de nacionalidad extranjera ha aumentado en 11.444 habitantes, destaca Gómez Caloca.
En estos nueve meses mientras la población de nacionalidad extranjera se incrementa en un 7,88%, la de nacionalidad española se retrae un -0,46% (-526).
Según la Estadística de estimación del número de nacimientos y defunciones, el saldo vegetativo hasta el 31 de agosto ha sido de -931, al producirse 1.452 fallecimientos por, apenas, 521 nacimientos. Una ratio de 2,8 muertos por cada nacimiento. Desde casi cuarenta años, desde 1987, no nos nacen más de los que nos mueren.
Si ampliamos el foco a los últimos doce meses (de 1 de octubre de 2024 a 1 de octubre de 2025), las tendencias y la conclusión final es la misma: una ganancia poblacional de +1.141 habitantes (+0,72%), que se debe al mayor incremento anual de siempre del número de personas de nacionalidad extranjera (+1.842), un incremento del 17,2%, que, además, oculta la secular pérdida de población de nacionalidad española (-971 habitantes), dando un saldo poblacional positivo, siempre según los datos aportados por el sociólogo Javier Gómez Caloca.
