Orgulloso de nuestra nación

Palencia

Yo soy español. Me siento orgulloso de pertenecer a un país plural, diverso, diferente, abierto…

Creo en un país que ha sabido en pocos años modernizarse, entrar en la Unión Europea, vivir más de cincuenta años de democracia.

Una nación con una de las mejores infraestructuras que hay en el mundo occidental, con una educación y sanidad, que con sus deficiencias es un modelo para muchos de nuestros países vecinos.

Claro que soy español. Pero no me gustan los que portan las banderas de la intransigencia, los ultras de ambos lados, los que separan, los que se creen en posesión de una verdad propia de la dictadura que nos gobernó durante 50 años. No me gusta la corrupción o los líderes que se endiosan en sus palacios

Escuchar, serenar, proponer son algunas de las recetas que necesita nuestra sociedad en este momento dentro del marco constitucional.

Pactar implica negociar. Implica bajarse del carro de la razón absoluta que muchos pretenden tener siempre. E implica también ceder. Tres actitudes: diálogo, humildad y cesión que parecen bastante distintas de los monólogos, chulería e intransigencia que vemos demasiado a menudo.

Creo en el país que apostó en el año 1978 por unirse. Aquel momento era mucho más difícil que el actual y muchos de nuestros mayores dejaron aparcadas sus diferencias. Sigamos soñando juntos. Es más lo que nos une que lo que nos separa.