Avanzan las obras de la nueva residencia de mayores de la Junta en Ávila que se prevé finalicen en octubre de 2028
Un edificio multiservicios adaptado al sistema de unidades de convivencia del nuevo modelo de atención residencial

Obras de la nueva residencia de personas mayores de Ávila./SER Ávila

Avanzan las obras de la nueva residencia de personas mayores de Ávila. Una nueva infraestructura que tiene un presupuesto de más 27 millones de euros y que no se espera concluir hasta, al menos, 2028 ya que el plazo de ejecución de las obras es de 40 meses,
Ávila cuenta actualmente en la capital con una residencia pública para la tercera edad de 40 años de antigüedad, situada en la calle Rufino Martín, pero la oferta, tanto de plazas como de personal, se espera que se duplique con la nueva infraestructura que, además de ser residencia, contará también con un centro de día.
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha presentado hoy la nueva residencia de personas mayores de Ávila de titularidad del Ejecutivo autonómico, que dará cabida a 180 usuarios, 100 más que las plazas que tiene el actual centro.
La residencia se construye para ser un centro multiservicios para personas mayores dependientes cuya filosofía de cuidados girará en torno al modelo de atención centrada en la persona. Responde a los estándares de centro multiservicio de cuidados de larga duración y se va a estructurar en unidades de convivencia, ajustándose al nuevo modelo de atención residencial establecido en la Ley de Atención Residencial de 2024. Es decir, se configurarán entornos acogedores, asimilables a un hogar, que garantizan la calidad de vida de los residentes, fomentan su autonomía y permiten el desarrollo de su proyecto vital.
Estas unidades están diseñadas para ofrecer una atención centrada en la persona, donde los cuidados de los profesionales se desarrollan de forma personalizada siempre de acuerdo con las necesidades y preferencias de los residentes, para que continúen viviendo conforme a sus valores personales y no tengan que cambiar su modo de vida.
Además, la Junta refuerza su apuesta por garantizar una atención residencial de calidad a las personas mayores o en situación de dependencia, más cercana y humana, a través de un nuevo modelo de atención residencial que avanza en Castilla y León. Como muestra, la nueva residencia de mayores de Ávila, que da respuesta a las necesidades de estos colectivos, ya que se amplía considerablemente el número de plazas, todas ellas preparadas para personas dependientes.
Precisamente, las características estructurales del actual centro, con una antigüedad de 40 años, impiden que la totalidad de sus plazas se adapte a personas dependientes, como sí sucederá con las 180 plazas del futuro edificio. De estas, 165 se distribuirán en 12 unidades de convivencia y 15 corresponderán al centro de día, que también se organizará como unidad de convivencia. Además, la nueva residencia contará con una unidad de convalecencia sociosanitaria para prestar atención sanitaria temporal a aquellas personas que lo precisen.
Tal y como ha manifestado Fernández Mañueco, las personas mayores son una prioridad para la Junta, y en el caso de que decidan seguir viviendo en su propia casa, pueden beneficiarse de las prestaciones del Ejecutivo autonómico, que incluyen la ayuda a domicilio, la ayuda al alquiler o la teleasistencia avanzada y gratuita, que atiende a 62.000 personas en la Comunidad. Además, durante su intervención, el presidente de la Junta ha reiterado el compromiso de la Administración autonómica con la prestación de los Servicios Sociales y la atención a la dependencia, que se sitúa a la cabeza de todo el país, y ha recordado que Castilla y León es la comunidad con más plazas totales y públicas.
Características de la nueva residencia
Las obras de la nueva residencia de personas mayores de Ávila se están acometiendo sobre una parcela de 13.000 metros cuadrados, situada entre las calles Hornos Caleros y Madrigal de las Altas Torres de la capital, y el inmueble constará de 15.500 metros cuadrados construidos, integrado por dos volúmenes diferenciados. El principal tendrá cuatro plantas, presentará una forma de ‘peine’ y allí se situará el alojamiento y la atención especializada. El segundo constará de dos alturas y en él se ubicarán tanto el acceso al edificio como el centro de día, así como las áreas de uso general. Una parte del edificio se construirá bajo rasante y en él se implantará la zona logística.
Se va a edificar un inmueble de vanguardia, moderno, sostenible y de alta eficiencia energética, que usará energías renovables y de bajo consumo a través de placas fotovoltaicas, aerotermia, caldera de biomasa y una de gas natural para casos de necesidad, y que será plenamente accesible.
En este aspecto, no sólo las instalaciones particulares de los residentes van a ser de fácil acceso, sino también los vestuarios del personal o los baños públicos de la planta baja, preparados para personas ostomizadas. El edificio va a estar plenamente adaptado a las personas con dificultades visuales mediante señalización en braille y pavimentos podotáctiles, pero también para aquellos con discapacidad auditiva, mediante la instalación de bucles magnéticos que transmiten señales de audio directamente a los audífonos o implantes cocleares. Además, incorporará un sistema de inteligencia artificial que reconoce sonidos, como mensajes o alarmas, y que genera alertas visuales para las personas con problemas auditivos.
Está previsto que la plantilla, de carácter público al tratarse de un centro gestionado directamente por la Junta de Castilla y León, se incremente un 50 %, especialmente en lo que respecta a la atención directa.
Innovación para facilitar la vida de las personas
La incorporación de innovaciones tecnológicas en los centros residenciales está vinculada a la implantación del nuevo modelo de atención integral y centrado en la persona, como así sucederá en la futura residencia de Ávila.
Destacan las estaciones de telemedicina avanzada, que permiten monitorizar las constantes vitales de los residentes sin necesidad de desplazamientos. Además, el proyecto Wifi Residencias Digitales ha dotado a todos los centros de red inalámbrica para permitir la implantación de nuevos sistemas tecnológicos y mejorar la comunicación digital de residentes y personal. Esta infraestructura digital está permitiendo poner en marcha los sistemas de control de caídas mediante radar instalados en camas; los dispositivos de control de errantes no intrusivos; el sistema de atención al residente (SAR), que mejora la comunicación entre residentes y personal asistencial; o la gestión inteligente de lavandería con identificación por radiofrecuencia, que evita extravíos y mejora la eficiencia del servicio.




