La lectura fácil hace del Museo de Valladolid un entorno más accesible
Plena Inclusión colabora con el centro para adaptar una de sus exposiciones

Museo de Valladolid / Ayuntamiento de Valladolid

Valladolid
Cuando hablamos de inclusión de las personas con discapacidad lo último en lo que solemos pensar es en la cultura y, sin embargo, es un aspecto fundamental para el desarrollo pleno de las personas. Por eso, que un museo se interese por hacer que su contenido llegue a todos los ciudadanos es siempre bienvenido.
Plena Inclusión ha colaborado con el Museo de Valladolid para adaptar a lectura fácil una de sus exposiciones. Esther Martin, técnica de accesibilidad cognitiva de Plena Inclusión, explica en qué consiste la idea: "Se ha hecho un folleto en lectura fácil que permite conocer lo más esencial de la exposición con un vocabulario más fácil y accesible para personas sin conocimientos técnicos o con dificultades de comprensión".
Asegura que cada vez hay más interés por hacer totalmente accesible la cultura, aunque a veces es todo un reto, como ocurre con el arte abstracto.
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Esther Martin, técnica de accesibilidad cognitiva de Plena Inclusión, explica en qué consiste la iniciativa del Museo de Valladolid
Y sin embargo, esto no es un capricho: en 2022 se incluyó en la ley General de Derechos de Personas con Discapacidad la accesibilidad cognitiva, junto a la física y la sensorial; de hecho, ya debería estar listo el reglamento que aplique de manera concreta ese derecho: "Ese reglamento, que no se ha publicado aún, nos va a decir qué elementos tenemos que tener en cuenta en cada ámbito para hacerlos más accesibles; se esperan que en la cultura, se inste a museos y otros espacios, se adapten a la lectura fácil".
Proceso de adaptación
La lectura fácil nació hace años en los países nórdicos y poco a poco se va aplicando cada vez más en nuestro país. En España solo hace tres años que las leyes deben estar en este tipo de lenguaje que facilita la comprensión: "Es una metodología para hacer documentos más sencillos, una forma de redactar y escribir para que todas las personas puedan entender ese documento".
En España está regulado por una norma UNE y que marca algunas pautas, como utilizar estructuras sencillas, como sujeto + verbo + predicado; usar un lenguaje muy familiar y coloquial o explicar los términos y palabras que sean más complicado: "En definitiva, hacer los textos fáciles para la mayoría de las personas".
Se puede -y debe- aplicar a todo: temarios para exámenes, sobre todo cuando hay alumnos con discapacidad, guías de salud como las de Sacyl, guías de violencia de género, algo muy importante esto porque la tasa de violencia de género entre mujeres con discapacidad supera el 40%.
Validadores
Plena Inclusión tiene lo que se denomina 'validadores', es decir, personas con alguna discapacidad intelectual que revisan los textos que previamente se han adaptado para ver si se comprenden bien.
La norma
En España la lectura fácil está regulada por la norma UNE 153101:2018 EX de lectura fácil que establece pautas y recomendaciones para la elaboración de documentos. En la web de Plena Inclusión podemos descargarnos un resumen en el que se recogen, por ejemplo, las indicaciones en cuanto a la ortotipografía: no abusar de las mayúsculas, hacer frases cortas, separarlas con un punto, hacer listas para enumeraciones de más de tres elementos o evitar caracteres poco habituales.
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En cuanto al vocabulario y las expresiones, nos recomiendan usar un lenguaje sencillo, explicar las palabras difíciles, evitar términos abstractos, las palabras muy largas o los superlativos. También deberíamos evitar las siglas, las abreviaturas o los términos en otros idiomas.
Si escribimos algún número es mejor que lo hagamos con cifras y redondeando; los bloques de los números de teléfonos deberían estar separados y también habría que evitar las fracciones y porcentajes.
La norma recoge recomendaciones en cuanto a las frases y oraciones; por ejemplo, usar el presente del indicativo siempre que se pueda, evitar la voz pasiva el gerundio y las oraciones impersonales. No incluir doble negación y usar, en la medida de lo posible, frases afirmativas.
Es una buena idea también redactar títulos informativos, escribir diálogos al estilo teatral y utilizar un lenguaje no sexista.

Beatriz Olandía
Es redactora en Radio Valladolid y edita los informativos Hora 14 Valladolid y Hora 25 Castilla y León....




