La presidenta de Junts per Catalunya, Laura Borràs, ha reconocido este jueves que estuvo «fuera de lugar» la interrupción del minuto de silencio por parte de un grupo de independentistas en el acto homenaje a las víctimas de los atentados del 17A. Decenas de personas concentradas en los alrededores de la Rambla de Barcelona abuchearon este miércoles a representantes políticos y gritaron «queremos la verdad», «vergüenza» y «vosotros, fascistas, sois los terroristas», mientras mostraban pancartas con lemas como «Reclamamos explicaciones», hasta el punto de que uno de los concentrados rompió el minuto de silencio gritando: «España es un estado asesino, queremos la verdad, hipócritas». En declaraciones a Catalunya Ràdio, Borràs ha afirmado que estuvo «fuera de lugar» romper el minuto de silencio y que ella lo respetó «escrupulosamente» en nombre de JxCat. No obstante, el finalizar el acto homenaje de ayer, Borràs se acercó a uno de los grupos que protagonizó la protesta, que la recibió con una ovación y gritos de «presidenta, presidenta», mientras la animaban a «romper el Govern». Hoy, la expresidenta del Parlament -suspendida de sus funciones por un juicio por corrupción- ha negado que saludase a quien interrumpió el minuto de silencio, y ha precisado que sí saludó a un grupo de personas, entre los que había víctimas, que querían «saber la verdad», según su relato. «Trumpismo es hacer ver que pasó lo que no pasó», ha dicho Borràs, que ha lamentado «determinadas lecturas» que se hicieron de su saludo a este grupo de manifestantes. Junts per Catalunya rechazó enérgicamente la interrupción del minuto de silencio a través de un mensaje en su cuenta de Twitter, que fue avalado por destacados dirigentes del partido, entre ellos el secretario general, Jordi Turull, y el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont. El exsecretario general de Junts Jordi Sànchez fue un paso más allá y afirmó que no era el momento «para buscar protagonismos políticos», algo que Borràs ha secundado hoy.