Detenido un hombre por secuestrar, maltratar y abusar de su pareja en Esplugues de Llobregat

Barcelona

La Policía Nacional ha detenido en Esplugues de Llobregat, en la provincia de Barcelona, a un hombre de 24 años que tuvo durante un mes secuestrada a su pareja, de 18 años de edad. El acusado, que ya ha ingresado en prisión provisional, maltrataba de forma brutal y sistemática a la joven, que tenía que pedir permiso a su novio para salir de la habitación o ir al baño. El acusado con frecuencia, abusaba sexualmente de la víctima, y la castigaba con dormir en el suelo maniatada de manos y pies si no aceptaba tener relaciones con él.

La investigación se inició tras la recepción de una denuncia anónima, en la que se informaba a la policía de que "un individuo tenía a su novia encerrada bajo llave, manteniéndola así privada de libertad, mediante violencia e intimidación; y amenazándola tanto a ella como a su familia", según explica la Policía Nacional. Este control llegó hasta el punto de no permitirle utilizar sin consentimiento su propio teléfono móvil ni disponer de llaves propias de su casa. En menos de 24 horas, los agentes lograron liberar a la víctima.

El presunto maltratador prendió fuego a su pareja

La joven sufrió un infierno en su propia casa. Era obligada a permanecer casi todo el tiempo encerrada en su habitación y tenía que pedir permiso a su agresor incluso para salir de su cuarto o ir al baño. Además de las amenazas constantes con las que convivía, el detenido la agredía habitualmente llegando, según la policía. En una ocasión, llegó a rociarle la cara y el cuello con alcohol para después prenderle fuego con un mechero.

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En cuanto los agentes localizaron a la víctima, pusieron en marcha un dispositivo para liberarla: solicitaron autorización judicial, para practicar la entrada en el domicilio en el que vivía junto a su agresor, "sometida a un férreo control y sin autonomía ni libertad para salir del mismo", según reza un comunicado de la Policía. El pasado día 19 de abril, los agentes que vigilaban el piso vieron a la víctima saliendo de su residencia habitual, junto a su agresor, al que se detuvo inmediatamente.

Acto seguido, se trasladó a la mujer a un centro hospitalario para ser asistida de las visibles lesiones, algunas muy graves, que tenía por todo el cuerpo. En el momento de ser interceptados, el agresor tenía en su poder el teléfono móvil de la mujer, "bloqueando así cualquier posibilidad de pedir ayuda por su parte", según la Policía, en línea, "con el total y absoluto control ejercido sobre esta persona, para evitar de manera absolutamente férrea cualquier posibilidad de solicitar ayuda; o simplemente de contactar con quien ella desee".

El pasado 21 de abril, el detenido pasó a disposición del Juzgado de Violencia sobre la mujer en funciones de guardia de Esplugues de Llobregat, que decretó su ingreso en prisión provisional sin fianza. Está acusado de detención ilegal, amenazas, lesiones, abuso sexual y maltrato habitual en el ámbito familiar.