El independentismo pierde mucha fuerza en la primera Diada con Illa al frente de la Generalitat
La Diada de ayer fue la más minoritaria desde que comenzó el 'procés' en 2012. Unas 60.000 personas salieron a la calle en Barcelona, casi la mitad que el año pasado
Barcelona
La manifestación organizada por la ANC y otras entidades independentistas en Barcelona con motivo de la Diada del 11 de Setiembre ha reunido a cerca de 60.000 personas, según la Guàrdia Urbana de Barcelona, la cifra más baja desde 2012, con la excepción del 2020, en plena pandemia del covid-19. La movilización de la Diada convocada por la ANC (Assemblea Nacional Catalana), la primera con un Govern del PSC y que este año ha contado con la complicidad de Òmnium Cultural y otras entidades soberanistas, ha tenido un formato descentralizado, con manifestaciones simultáneas en cinco ciudades catalanas -Barcelona, Girona, Tarragona, Lleida y Tortosa-, donde han participado un total unos 73.500 manifestantes, según cálculos de las distintas policías locales.
En Barcelona, la manifestación ha comenzado en la Estación de Francia, a escasa distancia del Parlament, a las 16:00 horas y ha llegado hasta Arc de Triomf, donde el presidente de la ANC, Lluís Llach, y el resto de líderes del independentismo civil han pronunciado los discursos. Según fuentes del Ayuntamiento de Barcelona, en la manifestación de la capital catalana de este año han participado 60.000 personas, frente a las 115.000 que lo hicieron el año pasado, cuando únicamente se organizó una marcha en Barcelona.
Los actos de la Diada
La defensa de la aplicación de la ley de Amnistía y la reivindicación de la "pluralidad" de Cataluña han marcado este miércoles las ofrendas florales al monumento a Rafael Casanova en Barcelona, en el inicio de una Diada sin la tensión de años anteriores. La portavoz del gobierno, Sílvia Paneque, ha defendido que Cataluña debe "ser capaz de acordar nuevos hitos de país, de crecimiento y de progreso".
Esta es la primera Diada del 11 de septiembre desde la investidura del socialista Salvador Illa como presidente de la Generalitat, quien, al filo de las nueve de la mañana, ha encabezado la ofrenda floral del Govern con la que se han iniciado la ronda de ofrendas que habitualmente depositan instituciones, partidos, sindicatos y entidades en memoria de Rafael Casanova, símbolo de los últimos defensores de Barcelona frente a las tropas borbónicas en 1714.
La encargada de trasladar el mensaje del Ejecutivo ha sido la consellera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica y portavoz del Govern, Sílvia Paneque, que ha resaltado que Cataluña "es más fuerte con consenso, unión y objetivos comunes" y ha dicho que la Diada es "una oportunidad para dialogar entre personas diferentes".
"Somos una tierra de acogida desde los inicios de la historia y hemos demostrado a lo largo de los siglos que el trabajo discreto, el consenso y la construcción de un proyecto común nos une como nación", ha recalcado.
A diferencia de años anteriores, no ha habido apenas abucheos por parte de sectores radicales del independentismo a las delegaciones de partidos e instituciones y solo en determinados momentos, fuera del perímetro de las ofrendas, una quincena de personas han abroncado a representantes de ERC y de partidos no soberanistas.
Tras encabezar la ofrenda de la Mesa del Parlament, el presidente de la Cámara catalana, Josep Rull, ha denunciado el "incumplimiento radical" de la ley de amnistía por parte del Tribunal Supremo, del que ha dicho que "se ha declarado en rebeldía".
También la presidenta de JxCat, Laura Borràs, ha reclamado no "olvidarse" de la "anormalidad democrática" que supone no aplicar la ley de amnistía y ha acusado a Illa de tener como prioridad "no molestar al PSOE".
Manifestación independentista con mensaje a sus líderes
Tras los actos de la mañana, la ANC y otras entidades independentistas han convocado su mítica manifestación, que ha salido alrededor de las 16h de la tarde a escasos metros del Parlament, y que ha lanzado mensajes directos a los líderes independentistas, más divididos que nunca. Según fuentes del Ayuntamiento de Barcelona, en la manifestación de la capital catalana de este año han participado 60.000 personas, frente a las 115.000 que lo hicieron el año pasado, cuando únicamente se organizó una marcha en Barcelona.
En la marcha, la ANC, Òmnium Cultural y otras entidades han exigido unidad a los partidos independentistas y han lanzado una advertencia: "Salimos a las calles porque ni estamos pacificados ni nos han pacificado". Un aviso que ha aparecido en el manifiesto que el presidente de la ANC, Lluís Llach, y el de Òmnium Cultural, Xavier Antich, han leído desde el escenario situado bajo el Arc de Triomf de Barcelona al término de la manifestación de la Diada.
"Los partidos políticos independentistas han sido incapaces de ponerse de acuerdo y de trazar una estrategia compartida para hacer efectivo el derecho a la autodeterminación a pesar de que la ciudadanía catalana se ha movilizado una y otra vez. Les hemos facilitado mayorías parlamentarias, que unos y otros han despilfarrado en discusiones cainitas", ha criticado Antich.
Turull (Junts): "Franco no pudo 'aplastar la nación' ni lo harán Felipe VI o un juez"
Por la mañana, el secretario general de Junts, Jordi Turull, ha asegurado que "ni los condes Duque de Olivares ni los Felipe V ni los Primo de Rivera ni los Franco pudieron aplastar la nación. No lo hará Felipe VI, no lo harán los 'llarenas', no lo harán los 'marchenas", en alusión a los jueces Pablo Llarena y Manuel Marchena.
"No lo harán incluso aquellos que tienen más vocación de delegado del Gobierno que de presidente de Catalunya y que quieren dormir las instituciones propias de Catalunya", ha dicho este miércoles en declaraciones a periodistas justo antes de la manifestación convocada en Barcelona por las entidades independentistas por la Diada.
Turull ha afirmado que "hay muchos ilusos que ya dan por enterrada" la causa independentista y ha añadido que desde Junts están más convencidos que nunca de sus objetivos, e invitan a la gente a tener esperanza y a incrementar su compromiso.
"Hoy no va de partidos. Hoy va de ciudadanos, hoy va de personas, hoy va de la fuerza de la gente, aquella fuerza que nos hizo ganar en un Estado a pesar de tanta represión", ha añadido junto a otros miembros del partido, como la presidenta, Laura Borràs, y el presidente del grupo del Parlament, Albert Batet.
Puigdemont celebra que la manifestación de la Diada recordará "una realidad incómoda" a los que la quieren "ocultar"
El expresidente catalán Carles Puigdemont resaltó este miércoles que la manifestación por la independencia que tendrá lugar esta tarde, por la Diada, servirá para recordar "una realidad incómoda y nada normal a aquellos que la quieren ocultar y normalizar", la de "un país al que se le niega con violencia y con represión el derecho a decidir libre, democrática y pacíficamente su futuro". Así lo indicó Puigdemont en un vídeo difundido en sus redes sociales, donde destacó que "manifestarse es una necesidad que tiene todo pueblo que quiera sobrevivir".
"No sobreviviremos porque un primer ministro español nos sonría mientras envía a sus sicarios a espiarnos y a criminalizarnos, sobreviviremos si les respetamos y si nos hacemos respetar", dijo. A su vez, comentó que "lo podemos hacer mejor", pero "nunca tendremos mejor fuerza para negociar o para tomar decisiones unilaterales que la movilización ciudadana". "Si el objetivo es la independencia la movilización es condición necesaria, si el objetivo es vivir con el Estatuto que el Constitucional recortó al pueblo de Cataluña, la movilización es un estorbo", matizó.
Tras participar en la ofrenda de una nutrida delegación del PSC, la viceprimera secretaria de los socialistas catalanes, Lluïsa Moret, ha reivindicado una Diada "de todos y para todos" y ha defendido la "pluralidad y diversidad" de Cataluña. Una idea similar ha planteado el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, que ha ensalzado la "diversidad" ideológica de Cataluña y ha remarcado: "La capacidad de sumar e integrar esta pluralidad es lo que nos hará fuertes como nación".
En ausencia de Oriol Junqueras y Marta Rovira, que en pleno enfrentamiento interno han preferido no exponerse, la delegación de ERC ha realizado su ofrenda y, posteriormente, el secretario general adjunto del partido, Juli Fernàndez, ha justificado la apuesta por investir a Illa a cambio de contrapartidas como la "financiación singular". "Reafirmamos nuestro compromiso y convicción de que el camino es tener más espacios de poder político", ha dicho Fernàndez, que se ha mostrado convencido de que así se podrán conseguir "mejores condiciones materiales para alcanzar la independencia".
La líder de Comuns en el Parlament, Jéssica Albiach, ha afirmado que una mejor financiación para Cataluña, "justa y solidaria", es "una oportunidad" para otras autonomías infrafinanciadas.
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La llamada a los jueces a aplicar la amnistía
Los secretarios generales de CCOO y UGT de Cataluña, Javier Pacheco y Camil Ros, han llamado a los jueces a aplicar la amnistía, mientras que el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, tras acompañar a la delegación de JxCat, ha asegurado que la voluntad de la mayoría de la cámara baja es que se cumpla la ley de amnistía.
Más allá de las ofrendas a Rafael Casanova, el expresidente catalán Carles Puigdemont ha hecho un llamamiento, desde la red social X, a mantener el hilo rojo de la "resistencia" catalana de 1714.
Mientras tanto, en la iglesia de Sant Baldiri, en Sant Boi de Llobregat (Barcelona), ha tenido lugar la habitual ofrenda floral institucional a la tumba de Rafael Casanova, con presencia de Rull, el ministro Jordi Hereu y las conselleres Alícia Romero, Núria Parlon y Esther Niubó.
En el acto de homenaje a Gustau Muñoz, militante comunista tiroteado por la policía en la Diada del 11 de septiembre de 1978, la diputada de la CUP en el Parlament Laure Vega ha asegurado que en el independentismo "no tiene cabida" una formación como Aliança Catalana, que solo quiere la secesión para "una parte del pueblo".