Albiol se desmarca de las antenas ilegales de Badalona que le han llevado al banquillo por prevaricación urbanística
Empieza el juicio contra el alcalde del PP y otros cinco excargos municipales que se enfrentan a hasta 2 años y 10 meses de cárcel y 10 años de inhabilitación
Barcelona
La Audiencia de Barcelona ha empezado a juzgar al alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, por la instalación ilegal de unas antenas telefónicas en 2012, durante su primer mandato. Albiol, baluarte del PP en Cataluña y uno de los responsables de la pasada campaña electoral de Alberto Núñez Feijoo, se enfrenta a dos años y 10 meses de prisión y 10 años de inhabilitación por presuntos delitos continuados de prevaricación urbanística y ambiental. En el banquillo se sientan otros cinco excargos municipales, tanto del PP como de Esquerra Republicana, así como las empresas Telefónica y Vodafone como beneficiarias, que se alargará más de una semana.
La fiscalía acusa a Albiol de permitir la instalación de las antenas de hasta 15 metros en el recinto de la Guardia Urbana de Badalona del Turó d'en Caritg, una zona reservada para uso cultural, que no reunía las condiciones para la instalación de esa infraestructura de telefonía. Según la fiscal, Albiol, que además de alcalde era el responsable de urbanismo, dio su consentimiento de palabra, sin ninguna resolución del consistorio ni licencia. La defensa del alcalde niega haber autorizado esa instalación y traslada toda responsabilidad a los técnicos municipales encargados de esos asuntos.
"En un ayuntamiento de 220.000 almas con 1.000 funcionarios hay determinados extremos que son ajenos, naturalmente, a la alcaldía", ha alegado el abogado de Albiol, Cristóbal Martell en el trámite de cuestiones previas. El letrado ha aportado varios documentos para sustentar su línea de defensa, como el censo de población en 2012 y la plantilla municipal, además de un informe en el que se sostiene que en el momento de los hechos la instalación de las antenas no despertó "el clamor abrumador" que suscita en la actualidad.
Ya en su escrito de defensa, Albiol se desvinculaba del "seguimiento diario y las cuestiones técnicas cotidianas que puedan resultar de la tramitación de licencias y disciplina urbanística como es la de las dos antenas móviles". Según su abogado, era "materialmente inexigible" que Albiol atendiera esa cuestión debido a su "dedicación política". Este lunes, antes de entrar a juicio, el alcalde ha atendido a la prensa para manifestar su tranquilidad: "Lo tranquilo que se puede estar cuando uno entra a un juicio. Pero llegados aquí, el juicio oral me va a permitir que se ponga encima de la mesa todo lo que ocurrió y lo que no ocurrió".
Los acusados declararán al final del juicio
Estaba previsto empezar la sesión con el interrogatorio de los acusados, pero para garantizar su derecho de defensa, los acusados han pedido declarar al final del juicio, previsiblemente la semana que viene. Además de García Albiol, también están acusados el exgerente de urbanismo, Xavier Salvà; el responsable de la empresa municipal dedicada la gestión urbanística, ENGESTUR, Tomás Vizcaíno; y el exconcejal de seguridad, Miquel Jurado, actual concejal del PP en Santa Coloma de Gramanet. No solo hay populares en el banquillo. También se acusa al exconcejal de Esquerra Republicana, Oriol Lladó, que cogió el relevo de urbanismo con el cambio de gobierno de izquierdas liderado por Dolors Sabater. El quinto acusado, Josep Duran, también republicano, fue el exjefe jurídico de urbanismo en 2015.
A partir de mañana, martes, desfilarán ante el tribunal los testigos. La sesión empezará con los Mossos d'Esquadra encargados de la investigación, además de varios funcionarios y exconcejales de Badalona para aclarar el proceso administrativo que siguieron las antenas de telefonía que funcionaron de 2012 a 2019. También está previsto que comparezcan los peritos de la Oficina Antifraude de Catalunya que cifraron en 17.448 euros los ingresos que el consistorio debería haber cobrado en concepto de impuestos a Vodafone y Telefónica y que Badalona no ingresó al tratarse de una instalación irregular. Además, las antenas costaron 8.300 euros a las arcas públicas porque se instalaron a la luz de la comisaría de la Guardia Urbana.
No es la primera vez que García Albiol va a juicio. El alcalde del PP ya fue juzgado hace 11 años por repartir panfletos xenófobos contra los gitanos rumanos meses antes de ganar sus primeras elecciones. En aquella ocasión, logró ser absuelto de un delito de odio.