La Audiencia de Barcelona avala la publicación del libro donde José Bretón confiesa el asesinato de sus hijos
La decisión judicial ya es firme y rechaza la petición de la fiscalía de suspender la distribución de 'El Odio': “Corre el riesgo de incurrir en la censura previa”
José Bretón en sede judicial / EFE
Barcelona
La Audiencia de Barcelona ha avalado la publicación del libro El Odio, donde José Bretón confiesa, por primera vez, el asesinato de sus hijos. El tribunal rechaza el recurso de la Fiscalía, que pedía parar la distribución de la obra, para poder leerla y analizarla antes en Fiscalía, y evitar vulnerar los derechos a la Imagen y el Honor de los niños asesinados por su padre. Los magistrados descartan la petición del Ministerio fiscal, que según ellos, "corre el riesgo de incurrir en la censura previa”.
La decisión judicial es definitiva, ya que el auto de la Audiencia, no se puede recurrir.
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La pelota está ahora en el tejado de la editorial Anagrama, que hace unas semanas decidió suspender la distribución del libro de Luisgé Martín. En un comunicado, el pasado 27 de marzo, Anagrama reivindició "que, en una sociedad democrática, debe existir un equilibrio entre la libertad creativa como derecho fundamental y la protección de las víctimas" y anunció que en un "ejercicio de prudencia y de forma voluntaria", la editorial decidía suspender la publicación de El Odio "de manera indefinida".
La decisión judicial, tomada por unanimidad por los magistrados de la Sección Cuarta de la Audiencia de Barcelona, se basa en criterios técnicos, procesales, aunque también en un principio muy básico: no se puede pedir la paralización de un libro que no ha sido demandado. En su recurso, la Fiscalía solicitaba paralizar la distribución de la obra para que la editorial mandase una copia al Ministerio público y los fiscales leyeran y analizaran el libro y valoraran si, como denunció la madre de los menores asesinados, Ruth Ortiz, la obra vulneraba los derechos de las víctimas.
El tribunal responde a la fiscalía que eso no es posible. "La medida, solicitada con carácter previo a la presentación de una demanda, aparece desatada de la presentación de cualquier demanda, presente o futura", critican los magistrados. “Aunque entendemos comprensible la sensibilidad del Ministerio Fiscal dadas las circunstancias" y "no se puede ser ajeno a las circunstancias que rodean este incidente ni a la especial protección que merecen las víctimas", prosigue la sentencia, "pero la legislación procesal civil no contiene mecanismos que permitan acceder a la petición formulada por el Ministerio Público.”
"La libertad de expresión es una garantía que protege a quien dice cosas que indignan"
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En otras palabras, la Audiencia mantiene que no se puede pedir una medida cautelar sin que se haya una causa abierta con una demanda presentanda o el anuncio de presentarla. En el caso concreto, los jueces concluyen que no se puede pedir la paralización de un libro que no se ha denunciado. De hecho, los jueces recriminan a la fiscalía, que no haya apuntado, ni siquiera, a quien demandaría: si a la editorial, al autor del libro o a ambos.
Andrea Villoria
Responsable de Tribunales y Sucesos de la SER en Cataluña
